Cómo pintar una pared de un color oscuro con otro más claro

Pasos para eliminar un color oscuro y dejar una pared blanca o de un color claro

Ernesto Díaz - 2020-08-31 16:27:00 - Bricolaje

Hace unos días se nos planteó un reto que, aunque parecía complicado, resultó bien sencillo siguiendo los pasos adecuados.

Se trataba de pintar una pared de un color oscuro con otro más claro. En nuestro caso, la pared era frambuesa y la queríamos dejar de color blanco. Un reto que no parecía sencillo ya que no parece fácil que un color muy intenso en una pared pueda ser suplido por otro más claro.

¿Lo conseguimos? La respuesta es sí, y lo mejor es que estos consejos para pintores novatos valen también para paredes color chocolate, cereza, azulón, naranja o cualquier otro color intenso. ¿Comenzamos?

Pasos para pintar una pared oscura de colores claros

como pintar sobre colores fuertes

Puede que, esa maravillosa idea que tuviste en su día de pintar la pared de tu cabecero, la del baño o la de la sala de estar de un color intenso, te parezca hoy en día una locura. A medida que pasó el tiempo te diste cuenta que los colores fuertes son pesados, hacen la estancia más pequeña y, sobre todo, cansan.

Si estás aburrido de ese color oscuro o fuerte y no quieres o no puedes pagar a unos pintores para que hagan el trabajo, te invitamos a que te pongas manos a la obra y lo hagas tu mismo. Es posible conseguir un resultado espectacular si sigues estos pasos, pero primero veamos qué necesitamos.

Materiales para pintar sobre colores oscuros

  • Pintura blanca (recuerda medir la superficie que necesitas pintar para no quedarte corto de pintura)
  • Un bote pequeño de pintura negra.
  • Un recipiente redondo.
  • Un palo o elemento similar para remover.
  • Agua.
  • Un rodillo grande.
  • Un rodillo pequeño.
  • Un pincel.
  • Cinta de carrocero o de pintor.

Todo este material podría salirte por unos 40 o 45 euros.

Para comenzar a pintar sobre tu pared oscura y aclararla debes

pintar la pared oscura de color claro

1- Limpiar la pared con un trapo húmedo y eliminar todo resto de polvo o suciedad.

2- Ir acotando la zona a pintar con cinta de carrocero para evitar manchar cercos de puertas, armarios, rodapié o el techo.

3- Cubre también el suelo con un plástico para que no se manche y retira los muebles.

4- En el recipiente redondo, vierte la mitad del bote de pintura blanca, añade la cantidad de agua que indique el fabricante y remueve hasta mezclarlo.

5- Añade unas gotitas de pintura negra poco a poco y remueve, la idea es que comiences a pintar tu pared no con pintura blanca, ya que no cubrirías bien el color oscuro, sino con un color más gris. Tienes que crear una tonalidad grisácea que permita matar el color intenso. Mueve bien con el palo, hasta que esté perfectamente mezclada.

6- Sin miedo y con ganas, aplica la primera capa a tu pared, verás que no lo cubres en la primera mano. Comienza por las esquinas, el rodapié y las zonas cercanas a armarios aplicando pintura con el pincel o brocha pequeño y termina de extenderlo con el rodillo pequeño. A continuación aplica la pintura con el rodillo grande donde haya más superficie de pared.

7- Deja que seque y aplica una segunda capa de pintura siguiendo el mismo proceso. Es preferible que las apliques en el mismo día. Al finalizar lava con abundante agua todos los pinceles y brochas.

8- Cuando haya secado, aplica ya la pintura blanca. Verás que poco a poco, tu pared ha perdido este intenso color que te tenía aburrida y puedes tener una pared blanca perfecta. Cuando seque, puedes retirar toda la cinta de pintor y disfrutar de tu obra de arte.

En caso de que desees un tono crema, marfil, verde claro, azul celeste u otro tono, deberás pintar en el paso 7 con este tono, en lugar de con pintura blanca, pero recuerda que, para matar el tono oscuro, necesitas un tono grisáceo, no blanco.

Consejos para pintar una pared

La pintura que has comprado lleva un tiempo parada, por lo tanto los pigmentos pueden haberse separado. Para que vuelvan a mezclarse utiliza un palo de madera para hacer un efecto batidora dentro del cubo de pintura y lograr que la mezcla sea homogénea. 

Ver también: trucos para pintar con un rodillo

El rodillo es el instrumento más útil a la hora de pintar un buen tramo de pared. Cuando lo introduzcas en el cubo de pintura, deja que el rodillo absorba bien la pintura, escurre el excedente sobre el lateral del cubo de arriba a abajo varias veces sin presionar demasiado. Algunas pinturas incluyen una paleta escurridora que se engancha a los laterales, de lo contrario, puedes hacerte con una para agilizar el trabajo.

Realiza un movimiento en W al mover el rodillo o en forma de M, es decir, mueve de arriba a abajo y en oblicuo. Trabaja siempre desde un borde que está húmedo hacia el otro para que no salgan líneas y ve rellenando, poco a poco, los huecos.

Retira la cinta de carrocero cuando la pintura esté seca (pero no lo dejes demasiadas horas ya que te llevarás parte de la pintura por delante).