Cómo cambia la amistad en la vida adulta explicado en 6 hilarantes situaciones
Así evoluciona la amistad a lo largo de los años
"Nunca volví a tener amigos como los que tuve a los 12 años, ¿acaso alguien los tiene” Así termina la película Cuenta conmigo (Stand by me) de Rob Reiner. Una frase que, tras las escenas finales de la película te deja pensando sobre la amistad y cómo ésta evoluciona a lo largo del tiempo. Así es como cambia la amistad en la vida adulta visto desde el lado irónico e hilarante.
Así cambia la amistad en la vida adulta
Esta es la diferencia entre un grupo de amigos de 16 años y el mismo a los 40:
Cambian las prioridades con las amistades: la amistad pasa de ser lo primero de tu lista de prioridades a estar en el último puesto. Con 16 años lo más importante es llamar por teléfono a tu amiga nada más despedirte de ella al llegar del colegio porque no le habías contado algo. Con los años, llamar a tu amiga va después de llegar del trabajo, recoger a los niños, poner la colada, hacer la compra y ayudar con los deberes. Es más, puede que lo dejes para otro día porque estás agotada y… en realidad no tienes nada interesante que contar.
Quedar con los amigos es una odisea: tu agenda de adolescente estaba llena de reuniones con amigos, salidas, viajes, cines… Con el paso de los años, de alguna manera, y casi sin darte cuenta, te encuentras intentando quedar con tus 4 amigos a través de WhatsApp y os dais cuenta que necesitáis 2 meses para encontrar una fecha que le venga bien a todo el mundo. Si además, alguien cancela a última hora y hay que volver a empezar. Quedar es más difícil que subir al Everes con patines.
Conversaciones con los amigos: las conversaciones de un grupo de amigos adolescentes pueden ir desde el monotema de los novios y chicos o chicas que le gusta a cada uno a chismes del colegio pasando por la última hazaña del futbolista de moda. Todo esto puede dar para conversaciones que duran horas, días y semanas. Las charlas de un grupo de amigos ya "maduritos" pueden ir desde las trastadas de los niños a lo difícil que está el trabajo. En fin, los temas son tan mundanos que al final la conversación vuelve años atrás para recordar a ese chico con el pelo de punta que os gustaba tanto o las barrabasadas que haciais ¡de adolescentes.
Lugares de encuentro con los amigos en la vida adulta: el lugar de encuentro de unos amigos en la infancia o adolescencia pueden ser desde las escaleras del portal, al coche aparcado en la calle o el banco del parque, sin olvidar por supuesto bares y discotecas de turno. Un grupo de amigos ya entrado en años no pintan mucho apoyados sobre un coche mientras hacen gansadas unos y otros, por lo tanto, el restaurante es la opción más socorrida. Claro que puede que os tengan que echar porque ya terminó el turno y seguís charla que te charla.
Formas de contacto: el diálogo directo era la forma más normal y común de contacto entre los amigos. El avance tecnológico y el poco tiempo hace que en muchas ocasiones recurras al móvil hasta para desear feliz cumpleaños a tu mejor amigo.
Salir con los amigos a lo largo de los años: hay una cosa que es igual en cualquier edad. Cuando sales una noche y tienes 18 años, quemas cada minuto como si fuera el último de tu vida y, cuando tienes 40, sales tan poco que el día que lo haces, quemas cada minuto como si fuera el último de tu vida.Es cierto, la amistad en la vida adulta cambia, hay menos tiempo para los amigos porque has creado otras parcelas de tu vida que también te demandan (familia, pareja, hijos, trabajo…) Pero ojo, hay una cosa que nunca cambia y sólo pasa en los grupos de los buenos amigos: pueden pasar 3 años sin veros y, cuando os reencontráis es como si no hubieran pasado ni 5 minutos de la última vez. Todo está en su sitio y vuelves a reírte de cualquier tontería como si tuvieras 16 años.