19 curiosidades sobre Beethoven: fascinantes hechos sobre el músico alemán

Ludwig van Beethoven​ es uno de los compositores más importantes de todos los tiempos. Nació en la Alemania de finales del siglo XVIII (Bonn, 1770) y murió en Viena en 1827, totalmente sordo, enfermo de cirrosis y con fama de hombre de trato difícil.

Beethoven dejó alrededor de 240 obras, entre sinfonías, conciertos para piano, cuartetos de cuerda y una ópera. Recibió el reconocimiento a su obra ya en vida, y aun después de ella, personas que jamás han estudiado a Beethoven son capaces de reconocer sus sonatas al escuchar tan solo unas notas. 

En 2020 se celebra el 250 aniversario del nacimiento del músico alemán por lo que hemos recogido una serie de interesantes curiosidades sobre Beethoven que te impactarán para celebrar esta importante fecha.

Ver también: test de preguntas sobre música

19 curiosidades de Ludwig van Beethoven

1. De Beethoven no se conoce la fecha de su nacimiento, la primera fecha que tenemos del músico alemán es la de su bautizo el 17 de diciembre de 1770 en Bonn.

2. Ludwig van Beethoven​ fue un niño muy precoz. Dio su primer concierto cuando solo tenía siete años de edad, a los 12 ya componía piezas a las que ponía extravagantes nombres como "Elegía sobre la muerte de un caniche".

3. El pequeño Ludwig no tuvo una infancia agradable porque su padre alcohólico quería ganar dinero con él cuando era un niño prodigio. A menudo lo levantaba de la cama en medio de la noche y lo obligaba a practicar el piano. 

4. Beethoven tuvo que mantener económicamente a su familia, lo que le llevó a dejar la escuela a los 11 años. Sin embargo, siempre le interesó formarse por su cuenta y leyó a los grandes filósofos y pensadores. Fue la principal fuente de ingresos de su familia.

5. Una de las obras más conocidas de Beethoven es su pieza para piano "Para Elisa" ("Für Elise"), estaba dedicado a Elisabeth Röckel, una cantante de ópera alemana a la que llegó a proponer matrimonio. 

6. Tras la muerte del músico, se encontraron una serie de cartas de amor a una dama desconocida que ha pasado a la historia como la "amante inmortal". Durante años se ignoró quién podría ser esta misteriosa mujer, ¿sería su Elisa? En biografías recientes se apunta a Antonie Brentano, una mujer casada que pertenecía a una importante familia. 

7. Los cuadros en los que se retrata a Beethoven nos muestra a un hombre rechoncho con una mirada seria e implacable y un gesto iracundo. Lo que no muestra es las marcas de viruela que tenía en el rostro, pero sí muestra su carácter. Aunque dicen que de joven tenía un talante alegre de joven, se volvió un hombre gruñón y colérico. Esta difícil conducta pudo deberse a su sordera. 

8. Una de las curiosidades de Beethoven más conocidas y sorprendentes es que perdió la audición a los 27 años. A los 48 estaba completamente sordo. Según las últimas investigaciones, se dice que fue el resultado del "tifus". Sin embargo, continuó componiendo ya que podía imaginar los tonos y su armonía en su cabeza. Hoy sabemos que los intentos de curación solo en ese momento fueron muy dolorosos y provocaron inflamaciones adicionales en el oído, que le convirtieron en el solitario y excéntrico hombre que fue.  

9. Beethoven tomó bajo su cuidado a su sobrino Karl tras la muerte de su hermano, sin embargo, le educó con tanta severidad que incluso llegó a intentar suicidarse para escapar de la tutela de su tío.

10. Además de la sordera, Beethoven sufrió otras muchas enfermedades y pasó gran parte de su vida con las molestias que le provocaban dolencias como reumatismo, tifus, trastornos de la piel, abscesos, una serie de infecciones, oftalmía, degeneración inflamatoria de las arterias, ictericia,  hepatitis crónica y cirrosis del hígado. Y es que, al igual que su padre, Beethoven abusaba de la bebida.

11. Beethoven se trasladó a Viena donde vivió gran parte de su vida y donde murió. Sin embargo, era un hombre quisquilloso y muy maniático y se cambió en repetidas ocasiones de residencia.

12. En 1802, durante un retiro a Heiligenstadt, en las afueras de Viena, un desesperado Beethoven escribió: "Habría terminado con mi vida; solo me detuvo mi arte. Ah, me parecía imposible dejar el mundo hasta que hubiera sacado todo lo que sentía que estaba dentro de mí". Esto ahora se conoce como el Testamento de Heiligenstadt y se publicó en 1828.

13. Con Beethoven llegó a su fin la era de la música clásica vienesa pero en su época fue considerado un revolucionario musical. Por ejemplo, usó un coro en una obra instrumental, en su novena sinfonía. Eso nunca había sucedido antes en una sinfonía clásica. 

14. Beethoven compuso principalmente sinfonías, cuartetos y obras para piano, sin embargo, dejó también una ópera, "Fidelio". Fue muy criticada en su primera representación en 1805, pero la corrigió y su versión final fue un éxito. 

15. La Sonata para piano n.º 14 en do sostenido menor «Quasi una fantasia», Op. 27, n.º 2, popularmente conocida como Claro de luna, estuvo dedicada al una estudiante a la que el compositor daba clases, Julie Guicciardi. Sin embargo, este nombre con el que ha pasado a la posteridad no le fue dado hasta 1832, cinco años después de su muerte. El poeta alemán Ludwig Rellstab dijo que el primer movimiento sonó como la luz de la luna brillando sobre el lago de Lucerna, y el nombre se quedó.

16. Beethoven dedicó una de sus obras a Napoleón, la "Eróica" durante la Revolución Francesa, con la que estaba fascinado. Pero cuando Napoleón se coronó emperador en 1804, cambió el concepto que tenía sobre este personaje y borró su dedicatoria de la portada de la partitura. 

17. Beethoven no solo estaba interesado en la música, sino también en la filosofía, la literatura y la política. En su primera fase musical le gustaba evocar lo heroico en las personas. En aquel entonces, estaba entusiasmado con la Revolución Francesa y dedicó su tercera sinfonía, la "Eroica", a Napoleón. Después de que Napoleón se coronó emperador en 1804, Beethoven, furioso, borró esta dedicatoria de la portada de la partitura.

18. Beethoven escribió un total de nueve sinfonías, muchas menos que su homólogo Mozart, que compuso más de 41. Sin embargo, este número ha pasado a la posteridad. Toda gran orquesta que se precie tiene las nueve sinfonías en el repertorio estándar. El número nueve en relación con las sinfonías también parece sobrevolar a otros maestros: Gustav Mahler o Anton Bruckner, por ejemplo, no podían pasar de una novena sinfonía.

19. Después de perder la audición, Beethoven se comunicaba con sus amigos haciéndoles escribir en "libros de conversación". Aun así, algunas de las obras más importantes de Beethoven fueron compuestas en la última década de su vida, cuando ya no podía escuchar absolutamente nada.