Por qué no oigo por un oído. Sordera repentina
Causas de la pérdida de audición y zumbido de oídos
Un proceso catarral puede producir una pérdida de audición temporal, pero también puede suceder que, un buen día sin más, se te tapone un oído o incluso los dos.
Cuando se tapona un oído puedes sentir mareo, náuseas, zumbidos y molestia ante los ruidos. No oír por un oído o por los dos de forma correcta, es una sensación muy molesta que puede tener diversas causas. Te contamos por qué se produce la sordera repentina en un oído y qué tratamiento tiene
No oigo por un oído, ¿por qué?
Existen diversos factores que pueden provocar una pérdida de audición por un oído o por los dos. Una infección de oído, sinutitis o cera en el oído pueden provocar una sordera temporal que no afecta al nervio auditivo y sí bloquea durante un tiempo el sonido para que no llegue al nervio.
En estos casos, la hipoacusia es transitoria y puede curarse en poco tiempo con un tratamiento. Sin embargo, el envejecimiento o la exposición a demasiado ruido puede provocar un daño al nervio auditivo y en este caso es posible que no mejore requiriéndose una acción más a largo plazo para devolver la capacidad auditiva al paciente.
Las causas más comunes de pérdida de audición en uno o los dos oídos son:
Infección: suele producirse durante un proceso catarral y puede ir acompañada de dolor de cabeza y congestión nasal. Puede sentirse presión y dolor en el oído debido a la acumulación de mucosidad y a la inflamación de las vías aéreas. Cuando el resfriado pasa, la audición recupera su normalidad.
Acumulación de cera: puede producirse de forma gradual o de forma repentina en caso de que entre agua en un oído y se mezcle con la cera. La cera se produce en la parte exterior del canal del oído, no en la parte profunda dentro del oído. Ocurre cuando se usan bastoncillos u otros elementos para limpiar los oídos y se empuja la cera hacia dentro.
Cambios de presión: puede ocurrir ante un cambio de presión atomósférica ya sea al viajar en avión u otro medio de transporte. La trompa de Eustaquio se bloquea momentáneamente. Es fácil acabar con esta sensación bostezando, masticando chicle, chupando caramelos o bebiendo agua.
Sordera súbita: se trata de una pérdida repentina y sin causa aparente de la audición en uno o los dos oídos. Puede causarlo un trauma en la cabeza, enfermedad de Ménière, trastornos neurológicos, infecciones o exposición a determinados medicamentos. Ocurre porque algo falla en el funcionamiento sensorial del oído interno.
Entrada de agua: durante la temporada de piscina es frecuente que se cuele agua dentro del conducto auditivo provocando una pérdida de audición.
Qué hacer ante la sordera repentina
- Ante una pérdida de audición repentina es conveniente consultar con el médico para que pueda valorar qué lo está produciendo. En caso de que se deba a un tapón de cera, procederá a extraerlo.
- En caso de infección en el oído el médico te podría recetar antibióticos.
- Ante una sordera repentina el especialista podría recetarte corticoesteroides, sobre todo si la causa no está clara. Se utilizan para reducir la inflamación y ayudar al cuerpo a combatir enfermedades.
- Si la causa de la hipoacusia es la toma de medicamentos te cambiará por otros que sean menos dañinos para tu correcta audición.
- Si la pérdida de audición lejos de ser transitoria responde a una dolencia más grave y el oído no responde al tratamiento, es posible que el especialista te recomiende usar audífonos o recibir implantes coclerares.