Método facilísimo para colgar cuadros sin taladrar la pared

Si eres de los que, cada vez que intentas colgar un cuadro, dejas la pared como un queso de gruyere, te invitamos a descubrir este facilísimo truco para colgar cuadros sin taladrar la pared.

En unos minutos habrás terminado con la operación, tu pared estará como nueva y, lo mejor, es que cuando decidas retirar el cuadro de esa ubicación, parecerá que jamás ha estado ahí. ¿Comenzamos?

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El mejor método para colgar un cuadro sin agujerear la pared

 

Para llevar a cabo este sistema necesitarás adquirir cinta de doble cara o tiras especiales para colgar cuadros. Para colgar este cuadro y demostrarte lo sencillo que es, hemos utilizado tiras adhesivas de la marca Command. Ya las habíamos utilizado con anterioridad y nos parecen sencillas de utilizar, limpias y, lo mejor, es que se retiran de forma muy sencilla si decides cambiar la ubicación del cuadro en cuestión. 

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Eso sí, el importe será un poco mayor que el de unos tacos y unas alcayatas pero, la verdad es que merece la pena. Es perfecto si no se te da muy bien clavar en la pared o si no te ves seguro para usar el taladro. Aproximadamente te saldrá por unos 5 euros un grupo de 4 tiras para un cuadro pequeño, que pueden sujetar hasta casi 2 kilos de peso. Las tiras medianas aguantan aun más peso, poco mas de 5 kilos y las grandes llegan a soportar más de 7 kilos de peso.

Veamos pues el paso a paso para utilizar las tiras adhesivas para colgar cuadros: 

1. Limpia la superficie para eliminar grasa, polvo u otras impurezas. Utiliza preferentemente alcohol, pero también puedes usar un limpiador adecuado a la superficie. Seca bien antes de continuar. Para seguir, deberás tomar las tiras para juntarlas entre ellas. Tienen como una especie de velcro que hará clic al contacto. Ve agrupando las tiras que vayas a usar, nosotros hemos empleado 4 pares de tiras.

2. Una vez las tengas, elimina una de las pegatinas y coloca la tira sobre la parte posterior del cuadro. Presiona firmemente y aguanta durante unos 30 segundos hasta que esté perfectamente adherida. Repite el proceso por las cuatro esquinas del cuadro para colocar todas las tiras adhesivas.

3. A continuación, retira las pegatinas que quedan a la vistas y que dejan a descubierto la parte que se pegará a la pared. Antes de pegar el cuadro, ten claro dónde irá. Puedes usar un nivel para trazar una línea a lápiz y guiarte por ella para evitar que quede ladeado. ¿Ya lo tienes? Ahora solo has de pegar el cuadro contra la pared, usando la guía a lápiz. Nosotros pegamos el cuadro sobre los azulejos de un baño y utilizamos como guía una de las juntas de los azulejos. Aprieta bien por las áreas donde están las pegatinas durante 30 segundos y echa un vistazo al resultado. 

4. No dejes todavía el cuadro colgado, tómalo desde la parte inferior para levantarlo. Verás que sonará el velcro que lleva y se separarán ambas tiras.

5. Tendrás que esperar a que la pegatina se adhiera bien a la pared. Espera alrededor de 1 hora para ello.

6. Una vez pasado el tiempo, solo tienes que volver a unir ambas caras de las tiras adhesivas. Asegúrate que se unen, para ello deberás escuchar como un clic y... ¡listo! Ya puedes disfrutar de tu pequeña obra de bricolaje.

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¿Cómo se retiran las cintas adhesivas para colgar cuadros?

Si pasado un tiempo el cuadro no te convence o prefieres colocarlo en otro lugar, puedes retirar las pegatinas de forma muy sencilla y sin dejar restos de pegamento en la pared.

Las que nosotros hemos usado, son realmente fáciles de remover. Solo hay que extraer el cuadro y, a continuación, presionar sobre la parte superior de la pegatina y tirar de la lengüeta que hay bajo la misma.

Estira bien hasta que salga por completo y listo, se despegará de forma muy sencilla.