Cómo desatascar un desagüe de forma casera y sencilla

Lo ideal sería que por el lavabo o por la bañera solo desagüemos, es decir, por el sumidero solo se vaya agua y jabón, sin embargo, con ella suelen ir pelos y otros elementos que obstruyen los desagües. ¿Sabes cómo actuar en estos casos? Te proponemos 8 sencillos trucos para desatascar un desagüe.

7 trucos para desatascar un desagüe de forma fácil y casera

Un buen día, mientras te lavas los dientes, comienzas a notar que el lavabo no drena como debiera, o mientras te duchas, el agua se acumula a tus pies. Según pasan los días, el atasco parece mayor hasta que… ¡horror! El desagüe está totalmente atascado. ¿Qué hacer?

Lo primero que solemos hacer en estos casos es eliminar el pelo y otros elementos que estén en el desagüe pero, si después de hacerlo persiste el atasco, es cuando buscamos entre las herramientas y aparecemos con el desatascador en mano dispuestos a acabar con el problema.

Cuando después de unas cuantas intentonas tratando de hacer ventosa y atraer la suciedad, el lavabo sigue sin tragar agua, espera antes de llamar al fontanero. Antes de que te desmonten la cañería, puedes poner en práctica estos sencillos trucos para desatascar un desagüe.

1. La percha para desatascar

Puede parecer un método chapucero, pero funciona. Toma una percha de alambre clásica y enderézala. Cuando esté más o menos recta, toma un extremo y crea un gancho con ella. Introduce tu herramienta casera por el desagüe e intenta pescar toda la porquería que pueda estar acumulada en la cañería. Cuando lo hagas recuerda no empujar la “basura” sino que has de extraerla. Cuando termines, deja que corra el agua caliente y listo. Te sorprenderás lo que puede salir de ella: pendientes, piezas de Lego, pelos y sí… mucha suciedad.

2. Bicarbonato de socio y vinagre para desatrancos

Es otro truco clásico casero para desatascar un desagüe y viene a sustituir al producto que puedes comprar en el supermercado. Para fabricar tu desatascador casero mezcla un tercio de taza de bicarbonato de socio con un tercio de taza de vinagre. En seguida reaccionará la mezcla así que prepárate para echarla por el desagüe. No utilices el lavabo o la ducha durante esa noche y, por la mañana, vierte agua muy caliente por el sumidero. La acción efervescente de la mezcla logrará deshacer toda la porquería acumulada.

3. Bicarbonato de socio y sal para eliminar la suciedad de la cañería

En este caso cambiaremos el vinagre por la sal. Mezcla media taza de sal común con media taza de bicaronato de sodio, viértelo por el sumidero y déjalo actúar durante media hora. A continuación echa agua hirviendo. Al reaccionar disolverá algunos de los elementos que tienes atascados en la cañería.

4. El truco del agua hirviendo para drenar el lavabo o la ducha

Es una estrategia fácil y muy económica. Hierve agua en un cazo y, cuando haya llegado al punto de ebullición, ve al lugar donde tienes el atasco y viértela despacio y con cuidado. Hazlo en varias fases para que el agua pueda ir penetrando poco a poco en la tubería.

5. Soda cáustica para desatascar

Puedes conseguirla en la ferretería pero para manipularla, utiliza unos guantes de goma y gafas para proteger los ojos ya que puede causar quemaduras.

6. Aspiradora húmedo / seco para extraer la suciedad

Coloca el aspirador en posición de húmedo para que sea seguro aspirar líquidos y colócalo a máxima potencia. Introduce el mango por el desagüe y la fuerza del aspirador debería ayudar a extraer la suciedad. Inserta la boquilla lo máximo posible para que pueda ascender bien. Ten cuidado para evitar que las partículas que son pequeñas para ser atrapadas por el aspirador salgan despedidas.

7. Lavavajillas y agua para desatascar el váter

Si lo que está atascado es tu váter, vierte unos 60 ml de lavavajillas en el váter y deja que repose durante media hora. Hierve agua y échala por el váter con cuidado para que no desborde. Intenta a continuación tirar de la cadena para comprobar que desagua sin problemas.

Estos trucos son realmente sencillos y te ayudarán a desatascar tu desagüe y, si no lo consigues, saca la hucha porque no te queda más remedio que llamar a un fontanero.