Cómo hacer berenjenas gratinadas con queso. Receta casera fácil

Las berenjenas es un vegetal que pertenece a la familia de las solanáceas. Ya sea a la parrilla, al horno, frita, gratinada, rellena o en guiso, esta verdura de un tono morado oscuro, aportan un delicioso sabor en nuestra cocina. Pero además, no solo son un ingrediente delicioso en muchos platos además contienen muchos nutrientes que son importantes para nuestro cuerpo. 

Si te gustan las berenjenas y quieres probar nuevas recetas, te invito a cocinar unas deliciosas berenjenas gratinadas con queso. Las berenjenas parmesanas son muy fáciles de elaborar y aportan un toque diferente a tu menú diario.

Ingredientes para preparar berenjenas gratinadas

• 1 berenjena de tamaño mediano
• Tomate frito
• Queso havarti
• Queso rallado parmesano
• Harina
• Aceite y sal
• Opcional: orégano

Cómo cocinar berenjenas gratinadas

1- Antes de meternos de lleno con la receta, es importante que preparemos la berenjena. Es una verdura que aporta un increíble sabor a las recetas pero también pueden tener un amargo sabor si no eliminamos ese líquido que contiene y que puede no resultar agradable al paladar. Para ello, corta la berenjena en rodajas y sumérgela en agua con unas cucharadas de harina durante al menos 2 horas. Verás como al finalizar el tiempo, el agua ha quedado oscura.

2- Pasado el tiempo, escúrrelas bien para evitar que suelten agua al cocinarlas. Ahora, las rebozaremos en harina y las freiremos en aceite caliente por ambas caras para que estén más sabrosas. 

Ver también: Aciertos y errores a la hora de freír alimentos

Consejo: cuando las saques de la sartén escúrrelas bien en papel de cocina para evitar que estén muy aceitosas.

3- Ahora llega el momento de montar la receta. Utiliza una fuente de barro (si no tienes, puedes usar una de pirex) y comienza a poner las distintas capas de ingredientes de este plato. Primero coloca una capa de berenjenas, sobre ellas tomate frito (bien triturado, casero o de brik, según el tiempo que tengas y tus gustos) y, finalmente, una capa de láminas de queso havarti. Y así, sigue poniendo capa sobre capa hasta al menos, tener 3 capas montadas.

Nota: puedes añadir alguna especia a tu elección como, por ejemplo, orégano.

4- Agrega queso rallado parmesano u otro queso que te guste por encima y mételo a gratinar al horno. Bastan diez minutos para calentarlo y que la capa de queso superior quede gratinada. Ya está listo para comer, ¡buen apetito!

Recomendación: si tienes prisa, también puedes meterlo al horno microondas. 

¿De dónde viene la berenjena?

La berenjena probablemente proviene de la India, y en China ya se cultivaba en tiempos precristianos. Llegaron a España alrededor del siglo XIII ya que los sarracenos las encontraron en Arabia y las trajeron hasta la península.

Por aquel entonces, las variedades existentes eran amarillas o blancas y tenían la forma de un huevo de gallina. La palabra "berenjena" probablemente proviene del término catalán para esta verdura. Desde España, llegó a Italia durante los siguientes dos siglos y luego a toda Europa, donde se convirtió en una parte importante de la cocina mediterránea.

Cómo almacenar las berenjenas en casa

La mejor manera de almacenar esta verdura es en un ambiente no demasiado frío, alrededor de los 10 grados. Estas verduras no deben colocarse junto a las manzanas y los tomates, ya que estos emiten un gas de maduración al que la berenjena es sensible y envejece más rápidamente. La berenjena se puede conservar en el frigorífico hasta una semana antes de cocinarla.

Beneficios de comer berenjenas

Contiene muchos nutrientes: las berenjenas contienen una amplia gama de nutrientes, entre ellos potasio, calcio, magnesio y cobre. Las berenjenas también contienen varias vitaminas, como el ácido fólico, aunque en una pequeña proporción. Asimismo contienen vitamina C, betacaroteno y vitamina K.

Bajas en grasa: las berenjenas apenas tienen grasa y son extremadamente bajas en calorías. Además, apenas contienen carbohidratos y, por lo tanto, son perfectas si has de seguir una dieta baja en carbohidratos. Se estima que una berenjena solo aporta 17 calorías (cada 100 gramos).

Reducen el riesgo de cáncer: además de otras plantas como el calabacín o la albahaca , de la berenjena también se dice que reduce el riesgo de cáncer. Los numerosos antioxidantes que contienen estas verduras de colores son los responsables de esto. El efecto de estas sustancias ya ha sido investigado en varios estudios. Y es que, los antioxidantes son sustancias que protegen nuestras células de los radicales libres.

Buenas para el corazón: no solo son buenas para regular los niveles de azúcar en sangre, sino que también se afirma que protegen contra las enfermedades cardíacas, gracias de nuevo, a los antioxidantes que contiene.

Alto contenido en fibra: las berenjenas también contienen fibra, que ayuda a mantener los niveles de azúcar en sangre y, por lo tanto, asegura una sensación de saciedad duradera.  

Receta y foto: Carmen Folgado Hidalgo (@Carmina49)

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