Por qué algunos eclipses lunares son más largos que otros

Curiosidades de los eclipses de luna

Ernesto Díaz - 2019-07-16 11:50:00 - Ciencias

Cada año, la naturaleza nos regala con un acontecimiento astronómico muy especial: los eclipses lunares.

No hay dos eclipses lunares iguales, algunos duran dos minutos y otros llegan a durar más de una hora. El 27 de julio de 2018 se produjo el eclipse lunar más largo del siglo XXI. Pasaron 4 horas desde el momento en que la sombra de la Tierra oscureció el borde de la luna hasta que ésta vilvió a brillar. Pero, ¿por qué algunos eclipses son más largos que otros?

Qué es un eclipse lunar

eclipses lunares largos y cortos

Un eclipse lunar ocurre cuando la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna, es entonces que se genera una sombra que oscurece la luna.

No sucede todas las noches, ni todos los meses porque para que suceda un eclipse lunar se deben dar unas circunstancias específicas: los tres cuerpos celestes, Tierra, Sol y Luna, han de estar alineados. De esta forma, la tierra bloqueará los rayos solares que llegan a la luna.

¿Imaginas según esto en qué fase lunar ocurren los eclipses lunares? Efectivamente, en luna llena.

Cada eclipse lunar tiene una duración distinta debido a los distintos patrones y ciclos que rigen su comportamiento.

El patrón básico de la luna es el siguiente la óbita de la luna tiene una inclinación de 5 grados y solo cruza el mismo plano de la tierra dos dos veces en cada una de sus órbitas. Por lo tanto, dos veces cada 11 meses, la tierra, la luna y el sol se sitúan en línea. Cuando la tierra está entre la luna y el sol ocurre un eclipse lunar, y cuando la luna está entre la tierra y el sol ocurre un eclipse solar. Dos veces cada 11 meses, esos cruces entre los astros

Esta es también la razón por la que eclipses lunares y solares aparecen separados por un par de semanas y suele haber cuatro eclipses totales a lo largo de 12 meses.

La razón por la que algunos eclipses son más largos que otros

No todas las alineaciones se generan de una misma manera, en ocasiones la alineación es imperfecta y tan solo una pequeña sombra cruza parte de la Tierra o la Luna. En otras ocasiones la alineación es casi perfecta, esos son los eclipses que duran y oscurecen mucho más.

Por lo tanto, la circunstancia que hace que un eclipse solar sea más largo o más corto es la época del año en la que sucede.

La Tierra, en su viaje alrededor del sol no realiza un círculo perfecto y, aunque parezca extraño, en julio, la tierra alcanza el punto más alejado de su órbita, se sitúa en un punto denominado afelio. En definitiva, estamos más lejos del sol que en cualquier otra época del año. Mientras que en enero, la tierra alcanza su punto más cercano al sol. ¿En qué afecta esto a los eclipses lunares?

En julio la tierra y la luna proyectan sombras más grandes, sombras que tardan más tiempo en desplazarse. Es cuando se produce los eclipses lunares más largos, en el verano del hemisferio norte. Mientras que en enero las sombras son más pequeñas, es invierno en el hemisferio norte y, por lo tanto, se producen eclipses más cortos y con menos sombra.