Por qué la mayoría de maridos infieles no abandonan a sus esposas
Razones por las que los infieles no quieren abandonar a sus parejas
En muchos países el número de separaciones supera al de matrimonios. Son muchas las causas por las que una pareja hace aguas pero, hay una razón por la que los hombres no se separan: tener relaciones extra matrimoniales.
Existe un elevado número de maridos infieles que no abandonan a sus esposas, descubre qué les lleva a mantener una doble vida.
La infidelidad en la pareja
Toda pareja sabe que, mantener un matrimonio a flote es complicado, aun más si cuando la pareja tiene hijos. La convivencia es un monstruo difícil de salvar, tanto es así que por ejemplo en Estados Unidos entre el y 50% de los matrimonios terminan en divorcio y en España se producen al año más separaciones que matrimonios. Es más, España es el segundo país de la Unión Europea en número de separaciones, nada más y nada menos que cerca de 400 000 en 2017 mientras que el número de bodas fue 171 000.
Las razones por las que una pareja se separa son muchas y variadas: el fin del amor, falta de entendimiento, problemas económicos y e algunos casos, pero no en la mayoría, las infidelidades.
Según un artículo publicado en la revista Today los hombres no abandonan el matrimonio cuando tienen una aventura, las mujeres que tenían relaciones con esos hombres casados afirmaban que éstos nunca abandonan a sus esposas.
Es algo muy común que los hombres mantengan una relación con su esposa, lleven un matrimonio normal, con sus altos, sus bajos, sus crisis y sus momentos álgidos y no duden ni un segundo a la hora de mantener relaciones extra matrimoniales.
Aunque en los últimos años, el número de mujeres infieles ha aumentado hasta casi igualarse con la del hombre, en Estados Unidos el engaño femenino oscila entre el 26% y el 70% y la masculina entre el 33% y el 70%, muchos hombres hoy en día mantienen vidas paralelas y se declaran incapaces de abandonar a sus esposas pero, ¿por qué?
5 razones por las que los infieles no abandonan a sus esposas
1- Se siente cómodo tal y como está: te conoce desde hace años, os habéis amoldado a costumbres y hábitos a pesar de las diferencias, pero nadie le conoce como tú. Contigo puede ser como realmente es, no ha de fingir, ni pretender. Eres una parte que completa su vida, la esposa que cuida la casa y los hijos con los que aprende y juega. La otra parte es emoción, sexo, diversión, picardía… ¿Por qué cambiar si lo tiene todo?
2- Algunos hombres buscan un descanso en sus relaciones matrimoniales. Después de muchos años, en los que la rutina lo es todo, el hombre busca nuevas experiencias, no tiene intención ninguna de abandonar a su familia, sino simplemente disfrutar de unas “vacaciones” de mujer e hijos.
3- El divorcio es un “desastre”: la separación es costosa, dolorosa y emocionalmente desestabilizadora. Cuando un hombre tiene una vida constituida en la que los engranajes funcionan, los horarios encajan, los sueldos llegan… cambiar es romper con todo lo que tanto ha costado construir. Es más sencillo seguir adelante y, de vez en cuando, poner un punto de emoción a su vida con relaciones esporádicas o incluso más largas.
4- ¿Para qué separarse si quiere a su mujer? Que tenga aventuras extra matrimoniales no quita que un hombre siga deseando y amando a su mujer. Hay quien es capaz de separar perfectamente los dos sentimientos, el de profundo amor hacia la pareja, y el del deseo por otras mujeres.
5- Los hijos son uno de los principales obstáculos a la hora de iniciar un trámite de separación. Iniciar todo un periplo de custodias, casas, vacaciones y demás logística que supone un divorcio, afecta enormemente a los hijos. Estos sufren las consecuencias de la incapacidad de seguir conviviendo en pareja y, un hombre infiel, por más que sepa que está engañando a su mujer, y su juego sea sucio, no desea una situación de separación para sus hijos.