Cómo abrochar pulseras sin ayuda: 3 trucos fáciles
Ideas para abrocharte una pulsera de forma rápida (con distintos cierres)
¿Cuántas veces tienes que pedir ayuda a alguien para que te abroche una pulsera? Puede resultar frustrante y también irritante abrocharla sin ayuda ya que solo dispones de una sola mano para poder enganchar el cierre.
Para que no vuelvas a ponerte de los nervios intentando abrochar una pulsera de mosquetón, enganche o reasa, te explicamos 3 trucos fáciles y rápidos para que puedas hacerlo tú sola. Y todo ello con elementos que seguro tienes en casa. Así es cómo puedes abrochar pulseras sin ayuda.
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Vídeo tutorial para abrochar pulseras fácil y rápido
Hay pulseras que pasan por la mano sin necesidad de que tengas que estar abrochándolas y desabrochándolas constantemente. Sin embargo, con otras no hay más remedio que ponerlas con una sola mano. Esto complica la tarea ya que, por más que te ayudes intentando dejar fija la pulsera sobre una superficie o estires mucho los dedos de la mano en la que irá la pulsera para agarrar uno de los extremos, puede ser complicado alcanzar el broche con el extremo. ¿Buscas soluciones rápidas y fáciles? Mira en este vídeo tutorial cómo puedes lograrlo en pocos segundos.
Truco 1 para abrochar pulseras sin ayuda: la horquilla
Este es un truco para abrocharte una pulsera muy sencillo y vale para distintos tipos de cierre. Basta con que utilices una horquilla clásica, aunque también puede servir una de moño.
1. Pasa la horquilla por el enganche o, si es muy pequeño, puedes pasarlo por otra arandela o enganche cercano.
2. Una vez que lo tengas, sujeta la horquila con la mano en la que llevarás la pulsera y, de esta manera, dejarás la pulsera fija y estable sin miedo a que se escape.
3. Ahora que la tienes bien agarrada, solo tienes que engancharla, bien con el mosquetón, la reasa, el cierre a presión o cualquier otro sistema que lleve.
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Truco 2 para abrocharte una pulsera fácil: el imperdible
En ocasiones, las arandelas de la pulsera son muy pequeñas y no pasa una horquilla convencional, para este caso, podemos poner en práctica este segundo truco: usar un imperdible.
1. De igual manera que en el caso anterior, pasamos el imperdible por una de las arandelas de la cadeneta y sujetamos con la mano donde irá la pulsera el imperdible, dejando fija la pulsera.
2. Ahora, con la mano libre, ya podemos abrir el mosquetón para abrochar la pulsera. En unos segundos lo hemos conseguido.
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Truco 3 para ponerte una pulsera tú sola: el clip
Si no tienes horquillas o imperdibles a mano, también puedes usar un clip. De hecho, es perfecto si con los métodos anteriores te quedas corta y no logras llegar bien a abrocharla. Un clip puede extenderse mucho más y tendrás más facilidad para asir el extremo de la pulsera y dejarlo fijo.
1. Abre el clip y estíralo lo máximo que necesites para no tener que estirar mucho los dedos al asirlo.
2. Pasa uno de los extremos por la pulsera y agarra el otro con la palma de la mano en la que te pondrás la pulsera.
3. ¿Ya la tienes sujeta? Ahora solo has de meter el pasador o cierre por el otro extremo y listo.
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Resumen
Para abrochar una pulsera sin necesidad de pedir ayuda constantemente a los demás, puedes utilizar elementos cotidianos como horquillas, imperdibles o clips. Estos elementos te ayudarán a mantener agarrado uno de los extremos de la pulsera para poder maniobrar cómodamente con la mano libre y lograr abrochar la pulsera tú sola. ¡Fácil y rápido!