Depresión después de los 40. Por qué hombres y mujeres caen en la crisis de los 40
Causas de la crisis de los 40 en hombres y mujeres
Seguro que has escuchado hablar sobre la crisis de los 40, una etapa en la que ya no eres el joven que tenía ante sí el mundo para comérselo, y afrontas una segunda etapa en la que sabes que te acercas a la vejez. No es fácil de asimilar para todo el mundo, tanto que muchos hombres y mujeres caen en la depresión después de los 40. Estas son las causas que les llevan a la crisis de la mediana edad.
La depresión emocional después de los 40 en hombres y mujeres
Según varios estudios la crisis de los 40 o 50 es algo más normal de lo que parece. Hombres y mujeres sienten que la vida se les pasa, que no han cumplido sus sueños y cada vez los ven más lejos. Las responsabilidades y el día a día se los ha tragado y creen que tienen pocas expectativas interesantes.
Esta sensación es más normal de lo que piensas, hay estudios que avalan que, si aguantas, si logras sobreponerte a esta sensación, las cosas cosas comenzarán a mejorar. Pero es importante atravesar el bache de la -y que conste que no nos gusta la palabra- mediana edad.
¿Qué estudios dicen eso? Varios investigadores del Darthmouth College en Hanover y la Universidad de Warwick en Coventry, recogieron datos de 2 millones de personas de 80 naciones distintas durante 35 años. Y, tras estudiarlos, llegaron a la conclusión de que hay un mismo patrón en el estado de depresión y felicidad, ¿cuál es? La edad. En la mitad de la vida, la misma vida, nos pasa factura, y tendemos a caer en la tristeza.
Este estudio, dice que la felicidad tiene una curva en forma de U, es decir, los dos picos altos corresponden con los momentos de mayor felicidad de la vida, al principio y al final de la misma, mientras que a la mitad de ella, es cuando afirmamos sentirnos menos felices.
Es un pico de depresión que afecta a hombres y mujeres por igual, a ricos y a pobres, a casados y solteros, a personas de distintos países, a padres y madres y a los que no lo son. Y, esa depresión se sitúa en torno a los 40 o 50 años.
No significa que no puedas escapar a la depresión después de los 40 años, hay a quien no parece afectarle esta etapa de la vida, incluso en algunos países esta etapa está considerada como la más placentera. Pero, si estás inmerso en ella, debes saber que aquel estudio que mencionamos, afirma que la mayoría de las personas salen de esta espiral a los 50 años.
Cómo viven los hombres la depresión después de los 40
¿Cómo puede ser que sea una etapa tan triste para los hombres y mujeres cuando han llegado al punto más productivo de su vida? Los hombres han ganado experiencia, estabilidad, su cuerpo ha llegado al punto álgido y su cerebro ha alcanzado un nivel óptimo de funcionamiento. Pues bien, por contra suceden otras cosas:
- Aunque el cerebro ha alcanzado su nivel máximo de capacidad, la falta de hormonas empieza a pasar factura y la capacidad cerebral empezará a mermar a partir de ahora. Los hombres son conscientes y sienten una mayor dificultad a la hora de aprender o estar al día de los cambios.
- Empiezan a hacerse presente enfermedades como presión arterial alta, problemas musculares, de huesos o afecciones genéticas.
- Los impulsos sexuales y la capacidad sexual comienzan a retroceder.
Ante esta nueva situación, que nunca pensaron que llegaría, muchos hombres entran en un frenesí en el que intentan demostrar éxito, hombría, capacidad para hacer deporte, inventan nuevos pasatiempos, tratan de encontrar tiempo para volver a salir por la noche, ligar, acercarse a mujeres más jóvenes. Se genera una obsesión por llevar un estilo de vida más asociado a la gente joven. Y, sin embargo, en el fondo, persiste una insatisfacción vital.
Cómo es la depresión después de los 40 en mujeres
Las mujeres también afrontan su propia depresión al llegar a la mediana edad, hay ciertos cambios que les afectan, los principales son:
- Ver los cambios en su cuerpo: comer lo que quieres, cuando quieres y cómo quieres ya no es posible. Cualquier exceso tiene efectos en tu cuerpo, engordas fácilmente y cuesta demasiado adelgazar. Simplemente mantener el peso se convierte en un reto. Es más, no solo es la grasa instalada en zonas donde no quisieras verlas, es el comienzo de las arrugas, la aparición de las canas, el descolgamiento de la piel, las arrugas alrededor de los ojos. Ya no pasas por una treintañera y eso, no te gusta cuando te miras al espejo.
- La menopausia está a la vuelta de la esquina y eso tiene su efecto a nivel hormonal, los niveles de estrógeno varían y eso combinado con las tensiones, el estrés y las responsabilidades, puede llevarte a sentirte más triste y deprimida.
- Empeoramiento de la salud: problemas cardíacos, empeoramiento de la visión, dolor de huesos… Un buen día comienzas a sentir los achaques y te das cuenta que estás entrando en otra etapa.
En las mujeres esta etapa la suelen vivir con más ansiedad y estrés, más aun si tienen hijos. Cualquier cosa es fuente de preocupación y de pasar noches sin dormir. Dedican poco tiempo a sí mismas y tienden a caer en una especie de tristeza.