Qué orden seguir para limpiar la casa de forma fácil y rápida
Qué es lo primero y lo último que hay que limpiar en la casa
Limpiar la casa puede ser un proceso bastante tedioso para muchas personas, y es que, es una tarea sin fin, no acaba nunca. Siempre hay algo que repasar, ordenar, colocar o limpiar de nuevo.
Sin embargo, esta tareas pueden simplificarse y volverse menos pesadas si sigues un orden para limpiar la casa. Toma nota de estos pasos. Te contamos lo primero y lo último que ha de limpiarse en el hogar:
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Qué orden seguir para limpiar la casa de forma fácil
1. Organizar la casa: recoger y despejar
Antes de comenzar a limpiar, es útil organizar cualquier desorden o artículos fuera de lugar. Puedes recoger ropa, guardar juguetes, libros y otros objetos en sus lugares correspondientes.
Debes también recoger cualquier basura o residuo que pueda estar en el suelo, mesas u otras superficies. Luego, despeja las superficies de los muebles eliminando elementos innecesarios.
2. Comienza a limpiar dede arriba a abajo
Una de las guerras más frecuentes en el hogar es con el polvo. Y, para eliminar de forma eficaz todo rastro de polvo, conviene comenzar desde lo más alto, para así evitar hacer trabajo doble.
Por lo tanto, empieza limpiando el polvo de las lámparas, ventiladores de techo o apliques. Después continúa por la parte alta de muebles o estanterías y desde ese punto, continúa hacia abajo.
Limpia las superficies de polvo utilizando un paño húmedo o productos de limpieza adecuados para cada superficie. Asegúrate de limpiar los muebles, estanterías, mesas y otros elementos como cuadros, elementos decorativos, etc.
3. Limpia los cristales
Establece una rutina mensual para limpiar las ventanas de la casa. Puedes utilizar productos limpiadores específicos o simplemente agua y vinagre.
Sin embargo, antes de hacerlo por la parte exterior de la casa, conviene que revises si amenaza lluvia. No hay nada más frustrante que dejar las ventanas brillantes para que caiga un chaparrón de barro en tu ciudad y tu trabajo no haya servido para nada. En este trabajo, no olvides limpiar los rieles de las ventanas.
4. ¿Qué parte de la casa limpiar primero?
No es significativo si comienzas por las habitaciones o la cocina, ya que depende de la distribución de tu casa. Pero sí conviene que establezcas tu propio orden para mecanizar esta tarea y hacerla cada vez de forma más eficaz y rápidamente.
Cuando limpies la cocina, comienza por los electrodomésticos y las superficies de trabajo. Limpia la vitrocerámica, el horno, el microondas, el fregadero y los mostradores. No olvides limpiar los armarios para eliminar marcas de dedos.
Llega el momento de limpiar los baños: son áreas importantes para mantener limpias y desinfectadas. Limpia el inodoro, el lavabo, la bañera o la ducha y los espejos. De nuevo, establece una rutina mensual para limpiar azulejos y juntas y evitar que se acumule demasiada suciedad en ellos.
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Para las habitaciones, el salón, la sala de entrar o la entrada, sigue el sistema de limpiar desde arriba hacia abajo.
5. Y, finalmente, limpia el suelo
Ahora que el polvo y la suciedad de las distintas superficies ya no está sobre muebles, encimeras o demás elementos. Es hora de rematar este sistema de orden de limpieza de la casa con el suelo.
Procede a aspirar todas las áreas de la casa, incluyendo alfombras, suelos y tapicerías de sofás y sillones (muchas aspiradoras tienen un aplicador para poder realizar esta tarea cómodamente).
Una vez que hayas aspirado todo el polvo que se ha acumulado tras la limpieza, puedes terminar fregando los suelos de la cocina y baños, e incluso, si el suelo de tu casa se puede fregar, esto ayudará a eliminar posibles motas de polvo que hayan podido caer con posterioridad.
En conclusión, ya ves que el orden de limpieza de tu casa será más eficaz si comienzas a limpiar de arriba hacia abajo, si estableces una rutina semanal y una mensual para realizar tanto una limpieza habitual como una más profunda.
Recuerda, en cualquier caso, que esta es una guía general de limpieza y puedes adaptarla a tus preferencias y necesidades. Además, puedes dividir las tareas en diferentes días si no tienes suficiente tiempo para limpiar toda la casa de una vez.
