Cómo aprender a estudiar: subrayado, resúmenes y esquemas
3 técnicas de estudio que ofrecen buenos resultados a los estudiantes
Aprender a estudiar debería formar parte del temario de los niños en la escuela ya que, a lo largo de la vida de un estudiante, tener las herramientas y técnicas de estudio adecuadas, les ahorrará mucho tiempo perdido, fracasos en exámenes y un pobre aprendizaje que se esfuma tras hacer el examen.
En Quonomy.com te explicamos a utilizar las 3 técnicas de estudio que mejor funcionan para aprender a estudiar: subrayado, hacer resúmenes y realizar esquemas.
Ver también: Cómo estudiar rápido y eficaz para un examen
Cómo subrayar un texto para estudiar de forma eficaz
El subrayado es una técnica de estudio que consiste en destacar las ideas principales en un texto para que resulte más fácil y eficaz subrayarlo. Sin embargo, es importante detectar cuáles son esas ideas principales y no subrayar lo primero que leemos o, como vemos en ocasiones, subrayar todo el texto. Para ello has de:
1- Leer el texto antes de comenzar a subrayar
Es imprescindible realizar una primera lectura del texto para analizar el contenido, saber de qué trata y poder detectar cuál es la idea principal del mismo. Una vez comprendido el texto, será mucho más sencillo poder reconocer las ideas principales para subrayarlas.
Ver también: Cómo mejorar la comprensión lectora
2- Subrayar solo las ideas principales o destacadas
Utiliza un subrayador para poder destacar del texto esas ideas principales que habías detectado. Si realizas un subrayado casi completo del texto, dejará de tener sentido este paso.
3- Subraya con sentido
La idea de subrayar con un rotulador fosforito es que, en un golpe de vista, puedas detectar las ideas principales, es decir, puedas captar la información esencial de la que luego extraer ideas secundarias.
La técnica del subrayado te ahorrará tiempo a la hora de estudiar y además permitirá poner en práctica la memoria fotográfica que será muy útil cuando en el examen hayas de recordar el temario.
Consejo: si el libro es tuyo y solo lo vas a utilizar tú, subraya en fosforito, visualmente será más fácil reconocer las ideas clave. Si utilizas un libro prestado o has de pasarlo a algún hermano, utiliza un lápiz para que luego pueda ser borrado por el siguiente estudiante.
Recomendación: también puedes hacer anotaciones a lápiz junto al texto que te sean útiles para extraer más información.
Ejemplo de subrayado
El titular ya suele venir destacado, por lo que visualmente ya está resaltado y puede ayudar a centrarnos en la idea que vamos a estudiar. El texto subrayado en amarillo corresponde a las ideas más relevantes, lo que sí hemos de tener claro y aprender, el resto, aunque es información que aporta más datos, es secundaria y podemos extraerla a partir de la idea principal.
Cómo hacer resúmenes de un texto
El resumen de un texto o un temario en una asignatura se basa realizar una redacción que contenga las ideas más importantes para comprender mejor lo que estás estudiando. Es una síntesis reducida del temario. Por lo tanto, hacer un resumen no significa copiar de nuevo el tema, sino condensar los puntos más relevantes evitando la información secundaria. En definitiva, hacer un buen resumen pasa por saber expresar de forma breve y precisa lo más importante de un texto. Para hacer un buen resumen, hay que seguir estos pasos:
1- Leer la información
Antes de ponerte a realizar un resumen, lee bien todo el texto. Es preferible si haces dos o más lecturas del mismo, ya que en cada una, podrás obtener más datos e ir viendo qué información es más importante y cuál es secundaria. En definitiva, sin conocer la información, no podrás resumirla. Es importante que hayas comprendido bien el texto para poder hacer un resumen.
2- Identificar las ideas principales del texto
Es importante que sepas diferenciar los conceptos fundamentales de los secundarios, es decir, de aquellos que son accesorios y solo complementan.
3- Elaborar el texto resumen
Haz una redacción en la que se expresen todos los puntos importantes del texto. Puedes usar las mismas palabras que el libro o puedes usar las tuyas propias.
Un buen resumen está hecho cuando están relatadas todas los puntos principales del texto y es fácil entender la idea general que contiene.
Ver también: Cómo hacer un buen resumen en 3 pasos
Tener un resumen a mano para poder estudiar o incluso repasar antes del examen es muy útil cuando tienes un temario muy extenso y ocupa muchas páginas, cuando hay fechas específicas que aprender, para elaborar trabajos en los que resumir biografías o temáticas específicas.
Cómo hacer esquemas para estudiar mejor
Está demostrado que los esquemas son una técnicas de estudio excelente para comprender y fijar los conocimientos. Por lo tanto, es recomendable estudiar con una hoja y un bolígrafo al lado para poder ir pasando un temario a esquema para repasar rápidamente cuando ya te lo sepas. De nuevo además, te servirá para poner en acción la memoria fotográfica y poder extraer la información ante un examen.
Hacer un esquema supone recoger gráficamente las ideas principales de un texto y la relación que guardan entre sí. Para hacer bien un esquema deberías seguir estos pasos:
1- Leer atentamente el texto
Como ves, para poner en práctica cualquier técnica de estudio lo principal es realizar una lectura comprensiva del texto.
2- Subrayar las ideas principales
Ver las ideas destacadas en el texto te ayudará a sintetizarlas a continuación en un esquema.
3- Realizar una gráfica con las ideas principales
Existen distintos tipos de esquemas: de llaves, de flechas, ramificado, de barras, horizontales, verticales, etc. Escoge el que más se adecúa a tu contenido y plasma en él las ideas principales y su relación entre sí. Es conveniente que las ideas que expresen los esquemas se plasmen de forma breve y concisa (no se trata de un resumen). Además, la información ha de reflejarse jerárquicamente, desde la idea más importante a las secundarias.
Ejemplo de esquema
Si observas este esquema sobre la clasificación de los seres vivos, verás que se trata de un esquema horizontal, de llaves en el que está plasmada toda la información de forma jerárquica, es decir, desde la información más relevante hacia los puntos que de ella se extraen.
Como comprobarás, no hay ningún resumen ni texto adicional, se trata de plasmar visualmente los puntos claves del tema. A partir de ellos, se puede ir desgranando la información.
Los esquemas son muy útiles para recordar ideas en un examen y que no se olvide ninguna ya que te permitirán memorizar y recordar la información esencial.
Conclusión
Entre las técnicas de estudio, el subrayado, los resúmenes y los esquemas son las más destacadas por su eficacia y utilidad. De hecho, se pueden combinar las tres perfectamente para preparar un examen, es decir, se puede e incluso se debe leer inicialmente un texto, subrayarlo, elaborar un resumen y finalmente un diagrama o esquema para poder fijar los conocimientos de forma más precisa. Los resultados de emplear estas técnicas son altamente beneficiosos para los estudiantes.