Cómo rejuvenecer unas manos envejecidas
Signos de la edad en las manos y trucos para mejorar su aspecto
No es infrecuente que invirtamos mucho tiempo y dinero en cuidar y mantener jóvenes algunas partes del cuerpo mientras que olvidamos otras. Cuello, escote, codos, rodillas y manos son grandes olvidados en cuestión de belleza. Sin embargo, las manos son una de esas zonas del cuerpo que revelan nuestra edad e incluso pueden ponernos años encima. Si es tu caso, sigue estos consejos para rejuvenecer unas manos envejecidas.
Qué signos pueden revelar la edad de nuestras manos
Si tu aspecto es joven y te conservas en perfecto estado pero crees que por tus manos ha pasado el tiempo y parecen las de una persona muy mayor, comencemos por ver cuáles son esos signos de la edad en las manos:
Manchas solares
Las manchas oscuras que marcan el dorso de las manos están causadas por años de exposición al sol, y una pobre o nula aplicación de protector solar en esta zona.
Piel arrugada
La exposición a la luz ultravioleta del sol también daña el colágeno y, si falta, la piel parecerá se verá más fina y con una apariencia arrugada.
Venas prominentes
Cuando se va perdiendo grasa en la piel, algo normal con el paso de los años, esas venas que estaban ocultas se exponen de forma muy notoria.
Manos secas
La deshidratación de la piel es algo normal a medida que se cumplen años, y comienza a ser más evidente en la menopausia. La función de barrera de la piel se debilita y las manos se vuelven más sensibles a agentes irritantes externos como el jabón con el que nos lavamos las manos.
Uñas amarillentas y frágiles
La decoloración de la uña puede ser debida al desgaste por el uso constante de esmalte de uñas o incluso a un signo de infección micótica (por hongos).
Además las uñas se pueden volver quebradizas con los años.
¿Manos envejecidas? Trucos para rejuvenecerlas
Ya sea que tu problema con las manos sea uno de los expuestos anteriormente o todos ellos a la vez, puedes echar marcha atrás al reloj, y echar una mano a tus manos, con estos trucos para manos envejecidas
Para eliminar manchas de la piel de las manos
Las manchas de la piel aumentan en tamaño con la edad por lo que antes de realizar ningún tratamiento estético has de asegurarte protección solar para ellas. Sal de casa siempre con tu crema protectora para evitar que el sol siga haciendo daño.
Para las manchas que ya se han instalado en tus manos puedes recurrir a la terapia láser, peeling químico, microdermoabrasión o a cremas para aclarar la piel. Esta última es una estrategia que tarda más tiempo en ofrecer resultados pero es más asequible. Las anteriores se realizan en clínica estética, son más costosas pero los resultados son buenos.
Para manos con parches escamosos
Si en tus manos han aparecido algunas zonas más ásperas, como si fueran parches pueden ser debidas a la queratosis actínica. Son parches ásperos y escamosos que salen tras años de exposición al sol, se trata de crecimientos precancerosos y suelen salir en personas de piel más clara.
En este caso, conviene que te vea las manos un dermatólogo para averiguar si ciertamente se trata de queratosis y controlarlos para evitar que se convierta en un cáncer de piel.
Para tratar la piel fina con venas prominentes
Cuando las manos pierden su plenitud juvenil, la piel se relaja y comienza a desarrollar una textura similar al papel crepé en el que las venas se hacen más notables.
En este caso el tratamiento pasa por inyectar un relleno o grasa de otra parte del cuerpo. Con el relleno las venas no se verán tan prominentes ni la piel tan transparente. Sin embargo, algunas venas pueden ser tan grandes que sea difícil esconderlas con grasa, si además la vena resulta molesta, has de consultar a tu médico ya que algunos tratamientos con láser o la escleroterapia (tratamiento para las venas varicosas) pueden hacer más pequeñas algunas venas.
Para la piel arrugada de las manos
Aplicar protector solar en las manos todos los días puede evitar que la piel se arrugue. Si no has estado haciendo esto durante años y ahora tienes la piel arrugada y te dan el aspecto de una persona más mayor, algunos tratamientos pueden ayudar.
Las cremas con retinol o ácido glicólico antes de acostarte puede mejorar la apariencia de las manos. Para tratamientos de mayor impacto es necesario recurrir a los peelings químicos o al tratamiento con láser o, en ocasiones, a ambos a la vez.
La radiofrecuencia, un tratamiento estético que envía calor a la piel, también puede contribuir a tensar la piel y a quitar años de tus manos.
Para manos muy ásperas
Si las cremas que compras no funcionan, es posible que necesites algún tratamiento más fuerte. Y es que, a medida que envejecemos, nuestra piel retiene menos agua, por lo que se vuelve más seca. Esto puede hacer que se vea áspera al tacto.
Un tratamiento a base de una exfoliación química leve puede devolver la suavidad a las manos. Además, aplicar un humectante a diario será una buena combinación para tratar la dureza de las manos.
Para uñas amarillentas y quebradizas
A partir de los 60 años las uñas se vuelven más frágiles. Para tratar las uñas quebradizas, debes dejar de hacer todo lo que podría estar causando el problema como pasar mucho tiempo con las manos mojadas o usar productos químicos agresivos sin usar guantes protectores.
Para las uñas amarillentas puedes usar bicarbonato de sodio, limón o pasta de dientes ya que ayuda a blanquearlas, además de pulirlas y retirar perfectamente el esmalte.
Conoce cómo blanquear las uñas
Hidrata bien las uñas, las cutículas y la piel circundante. Una crema de urea o un aceite mineral también contribuirá a mejorar la salud de tus uñas.
Consejos para mantener las manos jóvenes
- Protege tus manos del sol: esto es esencial si deseas mantener los resultados después de un tratamiento rejuvenecedor.
- Puedes optar por conducir con guantes protectores para evitar que el sol incida a través del cristal y cause daños en la piel.
- Utiliza guantes también para fregar, trabajar en el jardín o si vas a entrar en contacto con detergentes.
- Hidrata mucho tus manos: ten siempre a tu lado una crema y aplícala después de lavarte las manos o cuando veas que las manos se te han quedado secas.