Cómo se formó el sistema solar. El origen de nuestro sistema planetario
Cómo se originó el sistema solar con el sol, los 7 planetas principales y sus satélites
Dentro de la enorme complejidad e inmensidad del Universo hay un lugar que, para nosotros, es más importante que cualquier otro: el sistema solar.
El sistema solar ocupa más de 16 000 millones de kilómetros y está formado por el sol y los ocho planetas que giran alrededor de él con sus satélites y otros cuerpos celestes. Pero, ¿cómo se formó el sistema solar?, ¿cuál fue su origen?
¿Cuál es el origen del sistema solar?
Aquellos que se han dedicado a estudiar el universo, las estrellas, la formación de los planetas y los distintos misterios que todo ello encierra, han intentado, mediante el estudio del universo, dar una explicación al origen del sistema solar. La teoría que manejamos hoy en día se la debemos a Emanuel Swedenborg, un científico sueco que la formuló la actual hipótesis nebular hace ya 300 años.
Hace 4568 millones de años, se formó el sistema solar. Un sistema planetario, en el que se encuentra la Tierra, y otros 7 planetas más (Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno), además de otros 5 planetas enanos y otros cientos de planetas menores. El sistema solar se encuentra en la Vía Láctea, nuestra galaxia, que a su vez pertenece a una hipergalaxia conocida como Grupo Local y que está formada por otras 20 galaxias pero, antes de que nos estalle el cerebro con una magnitud tan apabullante como es el universo, volvamos al sistema solar y a su origen.
Se piensa que el sol y los planetas se formaron de la misma manera que cualquier otra estrella: por condensación de una nube de gas.
Lo que los astrónomos y expertos piensan es que ocurrieron una serie de hechos:
- Una determinada nube de gas se colapsó.
- A este colapso ayuda la explosión de una supernova que comprimió esa nube de gas.
- El material nebuloso se enriqueció con el material de la supernova formando una nueva mezcla.
A medida que se colapsaba la nube de gas, en el centro se fue concentrando la mayor parte de la masa y esto originó una enorme bola, más o menos esférica. ¿Imaginas qué terminó siendo esta esfera? Sí, el sol.
En la periferia de toda esta masa, el material se aplanó formando un disco que resultó ser inestable, por lo que los materiales más pesados se condensaron y se quedaron cerca del sol mientras que los materiales más ligeros se desplazaron y se fueron acumulando en la zona más externa de ese disco.
Esos materiales más pesados al girar en ese disco comenzaron a chocar entre sí y esa fuerza de giro comenzó a atraer partículas más pequeñas que se incorporaban a su masa, como cuando un remolino atrae por su fuerza de giro los objetos que se encuentran a su alrededor.
Así fueron formándose primero los asteroides que, seguían aumentando de tamaño por la incorporación de nuevas cantidades de materia y, dieron lugar a los planetas.
Y, en la zona más externa de este disco nebular, donde estaban los materiales menos densos, se formaron los planetas más lejanos al sol, que son mucho más grandes y ligeros.
Desde su formación, el sistema solar ha evolucionado mucho. Alrededor de los planetas de formaron lunas, unas como resultado de los discos de gas y polvo alrededor al planeta al que pertenecen y otras como resultado de enormes colisiones.