Lo que debe hacer y lo que no un becario para tener éxito

Solo unos pocos afortunados salen de la universidad con un contrato en una empresa, el resto hemos debido de pasar el trago de ser un becario en una empresa. 

Las prácticas son una forma de ir haciendo curriculum, de adquirir experiencia, de conseguir contactos y, sobre todo, meter un pie en el mundo laboral que te espera. Pero, si ser el nuevo en cualquier sitio ya es complicado, ser el becario aun lo es más. Sin embargo, de todas las prácticas que hagas, aprenderás algo, incluso de las experiencias más difíciles, de las meteduras de pata y de los errores. Sin embargo, no está de más conocer algunos trucos para sobrevivir en este entorno siendo el aprendiz, esto es lo que debe hacer y lo que no un becario para tener éxito.

Ser el becario

Hacer prácticas durante la carrera universitaria es uno de los objetivos de muchos estudiantes. No en vano es una fórmula perfecta para conocer el entorno laboral en el que desarrollarás tu trabajo, además de adquirir la experiencia que da el trabajo real y no la teoría de los libros, sumado al hecho de poder conocer gente de tu entorno. Vale la pena perder un verano haciendo prácticas o hacer un esfuerzo y estudiar y ser becario al mismo tiempo. Por más difícil que te resulte, habrás llenado un hueco vacío en tu curriculum y habrás adquirido un valioso aprendizaje.

Yo misma hice prácticas en varias empresas hace unos cuantos lustros ya, desde una agencia de noticias a una televisión local, pasando por la radio. No todas las experiencias fueron perfectas, pero sí aprendí algo nuevo en cada una y, a pesar de que, seamos realistas, trabajas por una dotación económica que no te llega ni para pagar el metro, los meses que pasé siendo una becaria supusieron un aprendizaje fundamental para lo que vendría después.

Eso sí, siendo el becario tendrás que pasar ese bache de errores, meteduras de pata, no saber hacer bien el trabajo, nervios, miedos, malos tragos... Pero, si logras hacer prácticas en algo relacionado con lo que te apasiona, también disfrutarás viendo trabajar a los expertos y cada día será emocionante y estimulante, así que no te pierdas nada de lo que ocurre a tu alrededor.

Lo bueno de ser becario es que muchas empresas terminan contratando a aquellas personas que han estado haciendo prácticas. Si hay un hueco que llenar y la persona dejó una muy buena impresión, los empleadores suelen recuperar a esos contactos para integrarlos en plantilla. Así me pasó a mi en su día y, con los años, también recluté a becarios que habían estado a mi cargo. Por lo tanto, ponte las pilas y no desaproveches la oportunidad. 

Eso sí, quizás te vengan bien estos consejos sobre lo que debe y no debe hacer un becario para tener éxito, basado en mi experiencia tanto como becaria, como reclutadora.

Lo que debes hacer como becario para tener éxito

Olvídate, tu trabajo no a a consistir en llevar el café al jefe, al menos yo jamás lo he vivido. Pero sí debes: 

Ser una esponja

En una pasantía, tu tutor te enseñará cuál es tu cometido, evaluará tu progreso y hará un seguimiento de tu trabajo. Por lo tanto, cuando te explique lo que has de hacer, toma notas, si tu memoria es efímera, no temas de usar un cuaderno y un bolígrafo para apuntarlo todo. 

Puede que hayas de aprender a usar un sistema interno de gestión, por lo tanto, intenta que no deban explicarte dos veces en qué consiste. Mira, observa, escucha, apunta y memoriza. A los tutores o empleadores, que ya de por sí suelen tener una carga grande de trabajo, darles más trabajo teniendo que explicar varias veces un mismo cometido, no les hará ninguna gracia.

Si has de recordar nombres de personas, apúntalos; si has de realizar una serie de labores fijas, apúntalas; si has de realizar recados fuera de la oficina, apunta qué recados, cuándo, donde... Apunta, apunta y apunta. Si eres un poco desorganizado, utiliza una aplicación para organizar todas tus tareas y así que no se olvide ninguna. 

Muestra interés

Pregunta sobre aquello que tengas dudas y muestra interés por cómo se hace el trabajo. No se trata de ser cotilla, se trata de demostrar atracción por la empresa y el trabajo en sí. 

Sé amable

Incluso si las prácticas que estás realizando no cumplen con tus expectativas, muéstrate amable y agradecido. Puede que no quieras trabajar más adelante en esa empresa o, puede que no encuentres el trabajo de tus sueños y siempre sea una opción. Mostrar buen talante ante el trabajo será bien visto por la empresa en la que haces las prácticas. 

Piensa que en muchas compañías el hecho de tener becarios no es ningún chollo, han de formarte, darte explicaciones, realizar un seguimiento. Esto implica un gasto de energía y de tiempo, por ello, la gratitud es fundamental. 

Hazte ver y oír

No te escondas. Quedarse en un rincón en el que nadie te ve o se percata de ti no es opción. No esperes a que los demás se te acerquen, aproxímate a tus compañeros, ofrece ayuda si la necesitan, preséntate voluntario para algún trabajo, participa de las conversaciones, propón ideas... En definitiva, déjate ver y oír. Si tienes un conocimiento que puede aportar algo a la empresa, apórtalo, bien sea porque dominas inglés, redes sociales, el uso de alguna aplicación que puede ser útil, etc.

Sé proactivo

Haz un esfuerzo con el trabajo que te han encomendado, incluso aunque parezca una tarea sin importancia intenta hacerla lo mejor posible y, si es posible, mejora el resultado que esperan. Si lo has acabado con tiempo, ofrece tu ayuda para solucionar otros temas, incluso propón la realización de alguna tarea que pueda ser beneficiosa para el equipo en el que estás, para tu tutor o tus compañeros. 

Aprovecha los recursos

Las pasantías brindan la oportunidad de aprender todo tipo de cosas sobre una industria o empresa. Si hay posibilidad de asistir a conferencias, hacer webinars, cursos o realizar formación, apúntate a todo. Es una excelente forma de ampliar tus conocimiento. 

Lo que no debes hacer cuando hagas prácticas en una empresa

Siendo un becario es fácil meter la pata, ya no solo en el trabajo en sí, sino en lo que se refiere a la forma en la que uno se enfrenta a las tareas, por lo tanto, te vendrá bien conocer lo que no debes hacer siendo becario: 

Preguntar demasiado

Si tu tutor en la empresa te ha explicado el trabajo y te toca ponerlo en práctica, es normal enfrentarse a las dudas, no tener todavía agilidad o tener preguntas. Sin embargo, una cosa es preguntar de vez en cuando y otra es ser el azote de tu tutor. Si ya te ha explicado cómo funciona ese programa de ordenador una vez, dos veces y tiene que explicártelo una tercera, terminará encomendándote una tarea menor y serás relegado a un limbo. 

Intenta ser más autónomo, antes de preguntar algo que ya te han explicado, piensa si puedes solucionarlo tú mismo, intenta dar con las respuestas, busca en tus notas, busca en Internet. Uno de los aprendizajes que habrás de realizar es a aprender a aprender. No vas a tener una niñera en el trabajo, es un tutor que en realidad tiene su propio trabajo. Si ve que necesitas demasiada guía y no puedes funcionar de forma autónoma o independiente no entrarás en su lista de posibles trabajadores.

No tomes las prácticas de forma informal

Vas a entrar en una empresa para aprender a trabajar, tómatelo de forma profesional. Establece contactos que te puedan servir, afróntalo con seriedad y evita convertir las prácticas en una fiesta haciendo colegueos que no te harán bien, charlando por los rincones con otros becarios, cotilleando, etc. 

Los estudiantes deben abordar la experiencia de la pasantía de manera profesional. Establecer metas de antemano ayudará a definir lo que quiere lograr y cómo llegar allí. Debido a que vivimos en un mercado global, los estudiantes deben darse cuenta de lo competitivo que es el mundo y actuar en consecuencia.

No llegues tarde y te marches pronto

Por más que tus prácticas estén mal pagadas o no lo estén en absoluto, cumple con el horario que se te ha impuesto. Sé puntual, incluso llega un poco antes de hora y márchate un poco después, indicará que estás dispuesto a aprender y a absorber la experiencia. 

Esperar a que te den trabajo 

¿Las primeras dos semanas fueron aburridas? Es una pena, pero eso no significa que deba intentar menos a partir de ahora. La perseverancia y la actitud optimista siempre son recompensadas. Si tu email está vacío, has terminado todo y todavía te queda algo de jornada, acércate a tus compañeros (sobre todo a los que trabajan en temas interesantes) y ofrece tu ayuda. Nunca te quedes de brazos cruzados.

No establecer relaciones

Hablar con el jefe no es ser pelota, aprovecha al máximo tu experiencia y olvida los comentarios de otras personas. Te interesa crear contactos y, sobre todo, mantenerlos cuando haya terminado tu pasantía por si surge alguna oportunidad futura. 

No preguntar a tu supervisor sobre tu evolución

No temas preguntar de vez en cuando a tu tutor sobre tu labor. La crítica constructiva es importante y te ayudarán a desempeñar mejor tu trabajo. Pide alguna valoración de seguimiento pasado un tiempo prudencial para ver cómo puedes mejorar.