Por qué me llora un ojo (10 causas y soluciones al lagrimeo)
Lagrimeo constante en un ojo ¿debo preocuparme?
Un ojo puede lagrimear por distintas razones, desde la alergia a una conjuntivitis. Te explicamos las distintas causas por las que te llora un ojo de forma constante para que puedas detectar qué puede estar ocurriendo.
Me llora un ojo, ¿por qué ocurre?
En ocasiones sucede que, uno de los ojos está constantemente lagrimeando, tanto que has de llevar un pañuelo para recoger el exceso de lágrima y evitar que irrite el párpado inferior la comisura del ojo. Puede suceder que incluso esta molestia dure varios días.
La cuestión es que, este lagrimeo puede estar causado por distintas razones, exponemos algunas de ellas para que puedas encontrar la más adecuada a tu caso y puedas consultar con tu médico en caso de duda:
1. Irritación en los ojos a causa de las condiciones climatológicas
En ocasiones, un cambio de estación puede provocar modificaciones en la humedad del aire. De hecho, tanto en las estaciones más secas como el verano o, cuando en invierno la atmósfera de nuestra casa tiene menos humedad debido al uso de la calefacción, el ojo puede secarse en exceso.
El ojo intenta combatir esta sequedad ambiental humedeciendo el ojo, es decir, produciendo más cantidad de lágrimas para lubricar el ojo. Este exceso de lágrimas puedes percibirlo fácilmente, ya que notarás que tus ojos lagrimean más de la cuenta.
Para evitarlo, puedes usar lágrimas artificiales y así ayudar a tu ojo de forma artificial a mantener una buena humedad.
2. Alergias
A finales del invierno, los alérgicos ya pueden comenzar a notar algunos síntomas relacionados con la alergia estacional, y es que, algunas plantas ya están polinizando en esta época.
Aquellas personas alérgicas a determinado tipo de plantas y el polen que producen, pueden notar más picazón en los ojos, además de enrojecimiento, hinchazón y, por supuesto, el lagrimeo.
Si eres alérgico, conviene que salgas a la calle con gafas de sol para proteger en mayor medida tus ojos, además has de lavar bien los ojos cuando llegues a casa para eliminar cualquier alérgeno que pueda estar cerca de tus párpados o tus ojos. También ayudan las gotas específicas antihistamínicas que puede recetarte tu médico para evitar que te llore el ojo constantemente.
3. Uso de algunos productos con aerosoles
Algunos productos cosméticos y de limpieza como la laca para el pelo, ambientadores, insecticidas y desodorantes, contienen sustancias que a algunas personas pueden resultarles irritantes. De esta forma, el ojo al entrar en contacto con las partículas que quedan en el aire, comienza a llorar y a irritarse.
Puede ayudar llevar siempre en el bolsillo una solución salina para los ojos o lágrimas artificiales para poder paliar esta reacción del ojo a estos productos.
4. Síndrome del ojo seco
Aunque parezca contradictorio, el síndrome del ojo seco puede provocar un exceso de lubricación en la superficie del ojo. El ojo seco o queratitis sicca es una enfermedad que afecta a la superficie dle ojo y que provoca molestias y problemas visuales. Consiste principalmente en la falta de lágrima en el ojo. Uno de los síntomas asociados al ojo seco es el riego constante de lágrima en el ojo. Y es que, las lágrimas están compuestas por tres ingredientes, cuando se produce un desequilibrio en ellos, las lágrimas no permanecen en la superficie del ojo y comienza el riego.
Aunque esta condición ha de seguirla un oftalmólogo, conviene tener una buena higiene en el ojo, evitar ambientes con calefacción o aire acondicionado, tomar precauciones si llevas lentes de contacto y aplicar compresas tibias con agua para aliviar esta sensación.
5. Conjuntivitis
Es una de las infecciones más comunes en los ojos. Sucede cuando hay una inflamación o infección en la conjuntiva del ojo, que es la membrana que recubre el párpado. No suele implicar gravedad, pero sí produce una gran molestia. La causa puede ser vírica o bacteriana, producto de catarros en vías respiratorias, así como alérgica, producida por un alérgeno como el polen o el polvo.
Cuando la conjuntivitis es causada por un virus, las gotas antibióticas no resuelven la afección, por lo que hay que recurrir a usar lágrimas artificiales, compresas frías y no tocarse los ojos. En caso de que la infección sea bacteriana, tu médico sí podría recetarte gotas que contengan antibiótico. Para el caso de la alergia estacional, existen tratamientos específicos que palían la irritación causada por el alérgeno, así como que el ojo llore en exceso.
6. Inflamación del párpado o blefaritis
Se trata de una inflamación que afecta al párpado, principalmente en la zona de las pestañas. Se produce cuando en esta zona hay presentes bacterias y secreciones aceitosas. En definitiva, es causada por las bacterias que se acumulan en los párpados. De hecho, es más frecuente en personas con piel grasa, caspa u ojo seco. La blefaritis puede causar irritación, enrojecimiento, lagrimeo y sequedad del ojo.
Puede ayudar lavar los párpados a diario y no tocarse con las manos los ojos.
7. Orzuelo
Si te llora el ojo también puede ser debido a un orzuelo, es decir, una inflamación de las glándulas sebáceas que se encuentran en la zona donde nacen las pestañas. Es una protuberancia en el párpado que resulta de la obstrucción de una glándula sebácea.
En estos casos, no debes rascarte los ojos, ya que puedes empeorar el enrojecimiento al provocar una infección con los microorganismos presentes en los dedos. No uses maquillaje, ni intentes apretar el orzuelo.
Es recomendable que acudas a tu médico para que te recomiende un tratamiento y mientras, aplica paños con agua tibia para ir ayudando a que se abra el poro de la glándula y pueda drenar.
8. Cuerpo extraño en el ojo
Es frecuente que puedan entrar en el ojo pestañas, arena o algún otro objeto extraño. En estos casos nunca debes frotarte el ojo ya que puedes causarte un arañazo en la córnea con el elemento que haya penetrado. Un rasguño en la córnea es extremadamente doloroso y causará enrojecimiento, visión borrosa y riego.
La córnea es una de las partes más sensibles del cuerpo y generalmente se cura rápidamente con el tratamiento adecuado. Lo más aconsejable es utilizar lágrimas artificiales para ayudar al cuerpo extraño a salir y, si la sensación de arenilla en el ojo no pasa, debes acudir a tu centro de salud para que puedan extraerlo si ha quedado incrustado en el párpado interno.
9. Uso de productos cosméticos
El maquillaje, rimel o lápiz de ojos pueden resultar irritantes para los ojos, de esta manera, pueden provocar lagrimeo e irritación en el ojo. Si has notado que un eyeliner o lápiz de ojos te provoca irritación, evita usarlo directamente en la línea del ojo, ya que es donde las glándulas oculares producen aceite. Si están obstruidos, no solo el maquillaje puede entrar en la glándula y causar una infección, sino que los orzuelos se volverán más frecuentes.
Si usas maquillaje, elimínalo bien al final del día y utiliza un producto específico para eliminar el maquillaje de ojos.
10. Desgaste de lentes de contacto
Las lentillas pueden causar irritación en los ojos si las usas demasiado tiempo o no las quitas para dormir. Si notas irritación en los ojos o lagrimeo cuando usas lentes de contacto, debes quitarla y mirar si puede tener alguna anomalía. En caso de que esté desgastada, has de deshecharla y consultar con tu oftalmólogo.