A qué edad se debe comenzar a usar crema antiarrugas

Cuándo empezar a usar productos antienvejecimiento

Andrea Hidalgo - 2019-10-31 16:03:00 - Belleza

En general, a las mujeres de 20 años no les preocupa en exceso el envejecimiento de la piel. Están en un momento óptimo, su piel es joven, tersa y libre de arrugas. Por lo tanto, como mucho, usan cremas hidratantes adecuadas a su tipo de piel y no buscan productos especiales para frenar el envejecimiento.

Cuando estas mismas mujeres llegan a los 30 comienzan a preguntarse si es el momento de usar cremas antiarrugas, sin embargo, muchas no lo hacen porque piensan que son productos para pieles realmente maduras. “Cuando me salgan arrugas, usaré crema antiarrugas”, piensan. Sin embargo, esta teoría no es en absoluto acertada. Conoce lo que dicen los expertos sobre la edad adecuada para comenzar a usar cremas antiarrugas.

Cuándo comenzar a usar cremas antiarrugas

cuándo usar una crema antienvejecimiento
Cuándo empezar a usar crema antienvejecimiento

El envejecimiento de la piel es algo inevitable, forma parte del ciclo natural de la vida. A medida que envejecemos, la piel pierde colágeno y elasticidad, aparecen las primeras arrugas y el descolgamiento de la piel. 

Hoy en día existe mucha más conciencia que hace unos años sobre el cuidado de la piel, además de una enorme variedad de productos cosméticos que nos ayudan a frenar los signos de la edad que ayudan a retrasar el envejecimiento celular de la piel. Sin embargo, muchas mujeres jóvenes entienden que, estos productos antiedad que suelen estar juntos en las tiendas cosméticas no son para ellas, por lo tanto pasan de largo.

Sin embargo, los expertos nos dicen que, la mejor forma de prevenir el envejecimiento de la piel es:

- Realizar una rutina de limpieza diaria de la piel y una o dos veces a la semana realizar una limpieza más en profundidad

- Usar protector solar a diario para prevenir los efectos dañinos de los rayos UVA del sol sobre la piel. 

- Llevar una dieta rica en antioxidantes.

- Usar productos adecuados a tu tipo de piel.

- Y sí, usar cremas antienvejecimiento entre los 20 años y los 30 años, es decir, no esperar en ningún caso a cumplir los cuarenta o ver las primeras arrugas para comenzar un tratamiento para tu piel.

Según tanto los expertos en cosmética como los dermatólogos, la piel comienza a envejecer a partir de los 20 años aunque los signos todavía no sean visibles. La exposición al sol, la edad y los constantes movimientos de los músculos faciales que realizamos al masticar, fruncir el ceño o sonreír hace que la piel vaya perdiendo elasticidad y tono muscular. Así, poco a poco, irán apareciendo arrugas de expresión, flacidez facial y pérdida de elasticidad.

Gran culpa de ello tiene la pérdida de colágeno, una proteína natural que mantiene unidas las distintas estructuras del organismo (ligamentos, cartílagos, huesos, tejido adiposo, músculos y tendones). A partir de los 20 años, la producción de colágeno se va reduciendo, es por ello que, los expertos recomiendan comenzar pronto el proceso de prevención del envejecimiento de la piel. Por lo tanto, si te preguntas a qué edad se debe comenzar a usar cremas antiedad la respuesta es entre los 20 y los 30 años, porque en esta etapa, ya se está perdiendo colágeno y pueden contribuir a retrasar el proceso.

Qué productos antienvejecimiento son recomendables

Si estás entre los 20 y los 30 años y te has decidido a usar productos antienvejecimiento por prevención, te encontrarás ante una enorme cantidad de opciones para acabar con las patas de gallo, la piel opaca, las líneas de expresión, las ojeras, la falta de elasticidad, la pérdida de tono muscular en la cara… Las opciones son tantas que es fácil perderse, ¿por dónde comenzar?

1. Cada día aplica protector solar en tu piel. Es una de las mejores medidas preventivas para que la piel no envejezca tan rápido ya que el sol contribuye a acelerar ese proceso de envejecimiento. 

2. Utiliza un humectante: no es lo mismo que una crema hidratante, lo que haces al humectarte la piel es crear una barrera protector para evitar que se evapore el agua de la piel. Favorece, por lo tanto la humedad de la piel y la protege de los agentes dañinos presentes en el medio ambiente. 

3. Utiliza una crema antiedad: la mayoría de los expertos recomiendan usar cremas con derivados de la vitamina A como el retinol. Es una vitamina que participa en el mantenimiento y en la formación de las células de la piel. Por lo tanto, las cremas que contienen retinol son los antienvejecimiento más efectivos. Las cremas antiarrugas que contienen derivados de la vitamina A pueden promover la elasticidad y firmeza de la piel, lo que hace que la piel se vea más joven. Además puedes adquirir un producto que contenga retinol por un precio asequible.

Otros ingredientes que puedes tener en cuenta cuando compres cremas antiedad es que incluyan ácido hialurónico, vitamina E, ceramidas, ácido glicólico y péptidos. Cómo y cuándo aplicar las cremas antiedad

Si ya tienes tu pequeño kit de productos antiedad para prevenir el envejecimiento prematuro de la piel y retrasar la aparición de los signos de la edad, es importante que sepas cómo aplicarlos, ya que es clave: 

- Cada día has de limpiar tu piel a fondo, más aun si utilizas maquillaje a diario. Por lo tanto, llevar una buena rutina de limpieza facial es esencial.

- Por la mañana, tras limpiar la piel debes aplicar tu gel, suero o crema habitual y después poner encima protector solar.

- Por la noche, tras limpiar de nuevo la piel, debes aplicar tu gel, suero o crema antiedad con retinol. 

Conclusión

Todos los expertos coinciden en no esperar a que la piel muestre los primeros signos de envejecimiento como las líneas de expresión, patas de gallo, piel opaca, pérdida de elasticidad y tono muscular y descolgamiento, para aplicar una crema antiedad.

En realidad, ya que la piel comienza a perder colágeno a partir de los 20 años, es en este momento cuando se ha de comenzar a usar un producto adecuado al tipo de piel que contenga productos como el retinol o vitamina A, ácido hialurónico, vitamina E, ceramidas o ácido glicólico.