Cómo adelgazar si trabajas sentado todo el día

Trucos para perder peso desde tu escritorio de trabajo

Ernesto Díaz - 2019-12-26 15:54:00 - Belleza Deporte Trabajo

Hay quien pasa tanto tiempo sentado en su mesa de trabajo que piensa que esta dinámica es incompatible con estar en forma o incluso adelgazar. Sin embargo, trabajar sentado tiene por qué ser un impedimento para lograr tu objetivo de bajar de peso. Algunos trucos pueden ayudarte a adelgazar si trabajas sentado todo el día. Toma nota de estos útiles consejos para perder peso cuando estás sentado en tu puesto de trabajo. 

8 trucos para adelgazar si has de trabajar sentado

Cómo adelgazar sentado en tu trabajo

Trabajar sentado todo el día no debe ser la excusa para tirar la toalla y comenzar a engordar. La obesidad es una de las epidemias de salud más graves que afectan a personas de todo el mundo. El sedentarismo, la mala alimentación y la falta de ejercicio es una mala combinación. Estos trucos pueden ayudarte a adelgazar aunque tengas que permanecer sentado muchas horas: 

1. Activa tu cuerpo cada hora

Este consejo es uno de los más repetidos por los expertos para todas aquellas personas que pasan gran parte de su jornada laboral sentada. El simple hecho de ponerse de pie para realizar alguna tarea lejos de la mesa, ayuda a prevenir el aumento de peso. Por más tarea que tengas, cada hora, levántate para ir al baño, ir a la mesa de un compañero para tratar un asunto personalmente y no por email o para recargar el vaso de agua.

Aunque no lo creas, el cuerpo consumo calorías a través de la actividad sin ejercicio, es decir, ese tipo de actividades moderadas como mover los pies, caminar hasta el baño, rellenar la botella de agua o pasar la aspiradora. 

Según los estudios, las personas que sufren obesidad, tienden a permanecer 2.5 horas al día más que las personas que no tienen sobrepeso. Por lo tanto, esos pequeños descansos que reactivan tu circulación, no solo te ayudarán a perder grasa, sino a resetear la mente y volver más fresco al trabajo. Si te olvidas de levantarte, ponte pequeñas alarmas en el móvil para evitar pasar horas sentado sin ni siquiera ir al baño. 

2. Evita los snacks y comida basura

¿Eres de los que guarda bollos, chocolatinas o snacks en el cajón de tu oficina?, ¿Asaltas la máquina de vending para sacar productos llenos de grasa, aceites y azúcares? El simple hecho de sustituir todo este tipo de tentaciones de la vista puede ayudarte a adelgazar si trabajas sentado, sobre todo, si tu actividad despierta una gran ansiedad que se dirige hacia la comida.

No tienes por qué pasar hambre, toma una pieza de fruta, un yogur, un puñado de frutos secos, galletas integrales... Opta por los alimentos nutritivos y bajos en grasa. Puede que te cueste al principio pero, las proteínas y la fibra, te ayudarán a saciarte y, te sentirás mejor contigo mismo cada vez que te subas a la báscula. 

3. Ten una botella de agua en tu escritorio

Ten siempre una botella, preferiblemente de vidrio, en tu escritorio que puedas rellenar cada día y controlar así el agua que bebes. Si estás bien hidratado, no solo ayudarás a eliminar grasas y elementos de desecho a través de la orina, sino que evitarás confundir la sed con el hambre. Puede provocarte sensación de saciedad y además es realmente saludable. 

También puedes tomar infusiones, té, limonada casera o cualquier otra bebida que te ayude a desintoxicarte, es decir, a eliminar toxinas del cuerpo. Evita las bebidas carbonatadas y las azucaradas si quieres adelgazar aunque pases todo el día sentado. 

4. Ejercicio abdominal mientras estás sentado

Si tu caballo de batalla es la barriga y no tienes tiempo para ir al gimnasio. Puedes trabajarlos mientras realizas tu labor profesional aunque sea sentado. Para ello, activa los abdominales apretándolos fuertemente y metiendo la tripa hacia dentro lo máximo que puedas.  Mantén esta tensión durante 10 segundos y exhala lentamente. Realiza 10 repeticiones al menos tres veces al día. 

No solo te ayudará a fortalecer la faja abdominal y las lumbares, sino que estarás realizando un trabajo muscular que ayuda a consumir calorías. 

5. Ejercicios de piernas mientras estás sentado

Para tonificar los músculos de las piernas y activar la circulación, colócate en una posición correcta en la silla, con la espalda recta y los pies bien apoyados en el suelo. A continuación, extiende la pierna derecha hasta que esté a la altura de la cadera, aguante unos segundos y baja de forma controlada y lenta y repite este ejercicio 10 veces. Realiza el mismo ejercicio con la pierna izquierda. Estarás trabajando toda la zona del psoas, abdominales y cuádriceps. 

Es un ejercicio sencillo que puedes realizar varias veces al día.

6. Ejercicio de gluteos mientras trabajas sentado

Este ejercicio puedes realizarlo a lo largo de la jornada laboral, es sencillo y fácil de realizar. Solo has de tensar los músculos de los gluteos, mantener la tensión durante 10 segundos y soltar. Repite esta operación 10 veces. Nadie se dará cuenta que estás realizando un trabajo muscular. 

7. Ejercicio para trabajar gemelos y pies

Este ejercicio te ayudará a activar la circulación sanguínea, algo muy útil para evitar sufrir de varices o arañas varicosas. Solo has de estirar un pie y realizar cinco movimientos circulares hacia un lado y después otros cinco hacia el otro. Has de repetir lo mismo con el otro pie.

8. Ejercicio para fortalecer los gemelos

Cuando tengas que realizar alguna llamada o tengas que hablar con algún compañero, ponte de pie y sujétate con ambas manos en tu silla. Coloca la planta del pie derecho en el interior de la pierna izquierda y aguanta unos segundos. Después cambia de pierna y realiza el mismo ejercicio.

También puedes ponerte de puntillas, aguantar unos segundos y volver a posición normal y repetir este movimiento varias veces. 

Conclusión

Trabajar muchas horas sentado no debe ser un obstáculo para lograr tu objetivo de perder peso ni para dejarte llevar por el sedentarismo. Incluso desde tu silla en tu puesto de trabajo, puedes mantener tus músculos a tono y quemar grasas realizando algunos ejercicios fáciles

La clave está en realizar unos movimientos precisos, lentos y controlados, intentando aguantar la tensión. Es importante que, en la realización de estos ejercicios, mantengas una buena postura evitando tirar de lumbares para evitar lesiones. Para ello, mantén la espalda recta y aprieta abdominales.