Por qué me duele el talón de Aquiles: tendinitis aquilea
Tendinitis del talón de Aquiles: qué es, causas y tratamiento
¿Sientes un dolor agudo en la parte trasera del talón?, ¿tienes dificultad para moverlo e incluso está hinchado? Esa zona se conoce como talón de Aquiles y varios factores puedes contribuir a que se hinche, produzca molestia e incluso pueda llegar a romperse.
Si te duele el talón de Aquiles, puede que sufras de tendinitis aquilea. Te contamos qué es, qué tipo de actividad lo causa y cómo puedes aplicar un tratamiento casero para mejorar la molestia.
- Qué es el talón de Aquiles y para qué sirve
- ¿Qué es la tendinitis de Aquiles?
- Qué causa la tendinitis del talón de Aquiles
- ¿Tengo tendinitis aquílea?
- Tratamiento casero si te duele el talón de Aquiles
- Tratamientos médicos para curar la tendinitis del talón de Aquiles
- Qué hacer para evitar la tendinitis de Aquiles
Qué es el talón de Aquiles y para qué sirve
Conocido así por el mítico relato griego en el que el héroe Aquiles es herido en esta zona, el tendón de Aquiles, situado en la parte trasera del tobillo.
Este tendón consiste en una banda de tejido fibroso que sirve para conectar los músculos de la pantorrilla (sóleo y gastrocnemio, o más conocido como gemelo) con el hueso del talón. El tendón de Aquiles está insertado en el calcáneo, el hueso del talón.
Es el tendón más grande y fuerte del cuerpo humano y tiene una función muy útil y básica para poder caminar, correr, ponernos de puntillas o saltar. Y es que, cuando el gemelo y el sóleo se flexionan, el tendón de Aquiles, tira del talón.
Sin embargo, aunque es un tendón fuerte, es vulnerable a las lesiones debido a que recibe un limitado suministro de sangre y además se le suele exponer a altas tensiones. Una de estas lesiones es la tendinitis aquilea o tendinitis del talón de Aquiles.
¿Qué es la tendinitis de Aquiles?
Hay dos tipos de tendinitis aquílea: tendinitis de inserción y de no inserción.
La tendinitis de Aquiles por inserción se localiza en la parte inferior del tendón, justo en la parte donde se une al hueso, mientras que la tendinitis de no inserción afecta a las fibras en la zona media del tendón.
Estas condiciones pueden producir molestia y dolor, además de una dificultad para mover correctamente el talón.
Qué causa la tendinitis del talón de Aquiles
Lo más frecuente es que se produzca una tendinitis a causa del excesivo ejercicio o de realizar caminatas de alta intensidad, de hecho, es una lesión frecuente en atletas. Puede agravar la lesión o producirla:
- No realizar un buen calentamiento antes de hacer ejercicio ni estirar después.
- Forzar en exceso el sóleo y los gemelos.
- Realizar un aumento brusco de la actividad física sin realizar un entrenamiento gradual.
- Usar tacones altos durante un tiempo prolongado o un calzado viejo y mal ajustado.
- Padecer artritis reumatoide.
- La edad, ya que este tendón se debilita con los años.
- Tener espolones óseos en los talones.
¿Tengo tendinitis aquílea?
Algunos de los síntomas más comunes que pueden llevarte a pensar que sufres tendinitis del talón de Aquiles son:
- Tensión en los músculos de la pantorrilla.
- Dolor localizado en la parte posterior del talón y posible hinchazón.
- Piel del talón caliente al tacto, debido a la hinchazón en esta zona.
- Movimiento limitado al intentar flexionar el pie.
Sin embargo, para poder realizar un diagnóstico preciso, es conveniente que visites a tu médico, quien determinará si sufres tendinitis aquilea. Puede que tengan que relizarte una radiografía o resonancia magnética para verificarlo, si con la palpación no es posible determinarlo.
Tratamiento casero si te duele el talón de Aquiles
En ocasiones, el tratamiento casero mejora sensiblemente el dolor y la hinchazón del tendón. Lo que puedes hacer para tratar la tendinitis aquílea es:
Reduce la actividad física
No ejerzas presión sobre el tendón durante unos días hasta que puedas caminar sobre el tendón sin dolor. El tendón generalmente se cura más rápido si no se aplica tensión adicional durante este tiempo.
Revisa tu actividad deportiva
Calienta siempre antes de practicar cualquier deporte y estira después, incidiendo en los músculos de la pantorrilla. Si el deporte que practicas está causando la tendinitis y no cede con el tiempo, quizás debas cambiar a un deporte que no ejerza tanta presión en esta zona.
Remedios caseros para el talón de Aquiles
- Mantén elevado el pie el mayor tiempo posible para reducir la hinchazón. Duerme con el pie sobre una almohada o cojín para mantenerlo por encima del corazón.
- Toma los medicamentos antiinflamatorios que te recomiende tu médico durante un tiempo limitado.
- Aplica hielo en la zona, envuelto en una tela, durante 20 minutos y repite este proceso tres o cuatro veces al día.
- Envuelve el tendón en un vendaje o cinta deportiva para comprimir la lesión y que no se hinche demasiado, pero no apliques demasiada presión para que no disminuya el flujo sanguíneo.
Es importante que cuides esta lesión ya que, a largo plazo puede causar otras lesiones como la rotura del propio tendón.
Tratamientos médicos para curar la tendinitis del talón de Aquiles
La tendinitis generalmente desaparece después de unos días, después del descanso y el tratamiento adecuado en el hogar, sin embargo, si los tratamientos caseros no funcionan y tu lesión no mejora, quizás sea necesario recurrir a los tratamientos médicos, entre ellos la cirugía para el talón de Aquiles
Si la lesión es grave y hay riesgo de rotura, tu médico podría programar una intervención quirúrgica. Se trata de realizar una incisión para abrir a la altura del hueso del talón y coser ambos lados del talón roto o fracturado. La recuperación tras la cirugía puede tomar desde unas pocas semanas hasta algunos meses.
Otros tratamientos que alivian la molestia son las inyecciones de esteroides o de plaquetas ricas en plasma.
Qué hacer para evitar la tendinitis de Aquiles
Si, en ocasiones sientes presión, hinchazón o dolor en el talón de Aquiles, es importante que tomes medidas para evitar el riesgo de padecer tendinitis, para ello:
- Estira los músculos de la pantorrilla nada más comenzar tu día, sobre todo, si ya notas la molestia nada más poner los pies en el suelo.
- Estira antes y después de realizar cualquier deporte, para ello colócate de pie con la pierna recta e inclínate hacia adelante sin levantar el talón del suelo. Sentado en el suelo, con las piernas estiradas, toma con la mano de los dedos del pie y estíralo hacia ti.
- Utiliza un calzado que tenga un soporte para el arco y una buena amortiguación. No uses zapatos planos, sin ninguna elevación, ni tacones muy altos.
- Combina distintos tipos de deporte para reducir la tensión en los tendones, es decir, si te gusta el baloncesto, intenta combinarlo con la natación para que tu tendón de Aquiles no sufra tanto.
- Acude a un fisioterapeuta ante los primeros síntomas para que pueda ayudarte a liberar la tensión en esta zona.