Cómo limpiar las toallas de playa y piscina (trucos para eliminar arena, sal y cloro)
Trucos para mantener las toallas de playa como el primer día
Las toallas que usamos en la playa o en la piscina sufren mucho por la acción constante de la arena o por los residuos de sal y cloro que se depositan en ellas tras el baño, sin olvidar los restos de protector solar y demás cremas que usamos.
Saber cómo limpiar tu toalla de playa o piscina te ayudará a mantener el rizo como el primer día y a evitar ese desagradable tacto áspero y acartonado que queda tras unos usos.
Trucos para limpiar las toallas de playa y piscina
Basta con pasar un caluroso día en la playa, en el que te das varios baños y repones cada hora la crema solar o un día la piscina en la que se suceden los chapuzones para que tu suave y esponjosa toalla de playa se vuelva acartonada, rígida y áspera.
Tanto es así que lo ideal es que se laven después de cada uso para evitar que el cloro de la piscina se coma los colores o el salitre del mar estropee el rizo de la toalla. Sin embargo, aunque generalmente apuramos y pasan unos días antes de entrar en la lavadora, sobre todo cuando estás de vacaciones fuera de casa.
Pues bien, si tienes unas agradables y gustosas toallas de playa, puedes limpiarlas para mantenerlas como nuevas siguiendo estos trucos:
1. Sacude muy bien la toalla
Cuando termines de usar tu toalla, invierte el tiempo necesario en sacudirla muy bien para eliminar toda la arena que puede haber quedado atrapada entre las fibras. Incluso si está todavía mojada, sacude vigorosamente (no lo hagas cerca de los que toman el sol plácidamente) para eliminar cuántos más granitos de arena mejor.
La arena suele adherirse a la toalla mojada, por lo tanto, habrás de insistir un poco hasta hacer un buen trabajo. Sacude la toalla también al finalizar tu día de piscina para extraer trocitos de césped, granitos de arena, polvo u otros elementos que pueden haber caído en ella.
Es importante que elimines la mayor parte de arena posible y no metas a la lavadora una toalla muy cargada de ella para evitar dañar el sistema de tu electrodoméstico.
2. Comprueba la composición de tu toalla antes de lavarla
Aunque en los últimos años se han puesto de moda las toallas de microfibra sintética, lo más habitual es disponer de toallas de algodón y, dependiendo de su gramaje, será más gordita o más fina. Comprueba la etiqueta de lavado para valorar si puedes usar agua caliente o necesitas un detergente delicado.
3. Lava tus toallas en la lavadora
Lo ideal, sobre todo si las utilizas en la playa, es lavarlas cada dos o tres días. De lo contrario, llegarás un día a la playa y, cuando vayas a extender tu toalla parecerá cartón y no una gustosa tela.
Es preferible que laves todas las toallas de tu familia juntas en la lavadora y las distribuyas de forma uniforme para mantener el equilibrio en la lavadora y lograr que se laven correctamente.
Si la toalla lo permite, te recomendamos lavarlas con agua caliente para eliminar cualquier bacteria de la piscina o los hongos que presentes están en estos entornos. Puedes escoger un ciclo de lavado regular en lugar del corto para que el detergente actúe de forma correcta entre las fibras de la toalla.
También puedes poner un ciclo con agua tibia cuando no estén muy sucias para asegurar la elasticidad de la toalla.
Si tus toallas tienen manchas de crema solar que no salen bien en la lavadora, te recomendamos aplicar unas gotitas de jabón de lavavajilla sobre ella, frotar con el dedo por toda la extensión y dejar que actúe. Después, sin aclararlo, puedes introducirla en la lavadora.
Truco: mete una pelota de tenis en tu lavadora mientras lavas las toallas para que choque contra ellas durante el ciclo de lavado y elimine mejor la suciedad.
4. Evita el suavizante
Puedes pensar que el suavizante de ropa es necesario para mantener tus toallas suaves, sin embargo, pueden afectar a su capacidad absorbente y, existen otros trucos que pueden ayudarte en esta tarea.
Puedes añadir una tacita de vinagre blanco en el aclarado. Ayudará a eliminar restos de jabón y a devolverle la suavidad y absorción.
Consejos para cuidar tus toallas de playa
Si te has dado un baño antes de irte de la playa o la piscina y tu toalla está mojada, ten la precaución de sacarla de la bolsa en cuanto llegues a casa y tenderla al sol para que no guarde humedad en ella y se convierta en un foco de moho u hongos.
Si metes en la lavadora todas las toallas de tu familia y no cabe ni un calcetín, las toallas no se lavarán correctamente. Asegúrate cuando cargues la lavadora que puedes meter tu mano por encima de las prendas y ha hueco.
Añadir bicarbonato de sodio en el lavado ayudará a aflojar las fibras que han podido quedar prietas y ajustadas a lo largo de los distintos lavados y así le devolverás la suavidad.
Tiende las toallas al aire libre para que se sequen bien, esta medida es preferible al secado en el interior de la vivienda, donde pueden guardar humedad, más aun en climas húmedos.
Si acabas de comprar una toalla nueva, te recomendamos que realices un primer lavado antes de irte con ella a la playa o a la piscina. Hay toallas que sueltan mucha pelusa y podrías llenarte de bolitas del color de tu toalla.
Si tienes una toalla muy buena y no quieres que sufra sobre la arena de la playa, puedes colocarla sobre una esterilla.
