Cómo aprovechar la energía del sol en los hogares y en la industria

Gracias a la energía del sol, entre otras cosas, hay vida en la Tierra. La temperatura que nos proporciona hace que, en nuestro planeta, se den las condiciones necesarias para que plantas, animales y seres humanos, podamos subsistir.

Pero, toda esa fuerza y calor que nos llega a través del principal astro de nuestro sistema solar para que exista la vida, ¿se puede acumular?, ¿podemos aprovechar la energía del sol en los hogares y en la industria?

Todo lo que somos y tenemos... procede del sol

Las plantas necesitan del sol para subsistir y llevan millones de años aprovechando la energía solar para realizar la fotosíntesis, que las lleva a crecer y sobrevivir. Es decir, las plantas extraen energía solar para realizar sus distintas reacciones químicas. 

Los animales y las personas, no hacemos la fotosíntesis, pero sí aprovechamos las plantas para alimentarnos, y además usamos esa energía solar de múltiples maneras. 

- Las lluvias, el viento, la evaporación del agua y otros fenómenos meteorológicos están impulsados por la energía solar.

- Los combustibles que usamos, tanto el carbón como el petróleo, tienen un origen vegetal y, por lo tanto, requieren de la energía del sol.

- Una de las teorías en las que se basa la formación de los planetas, afirma que se forman como condensación del polvo que procede del Sol, por lo que, todo lo que somos y hacemos, se lo debemos a este astro. 

En definitiva, todos los procesos que se llevan a cabo en la Tierra, tienen su fuente en la energía solar, ya sea directa o indirectamente.

Solo se excluye a la energía radiactiva y geotérmica que procede del núcleo de la Tierra, y a la influencia que tiene la Luna sobre mareas. 

¿Se puede aprovechar la energía del sol?

La pregunta es más que obvia, visto todo lo anterior, porque la cuestión no es si se puede, ya que no hacemos otra cosa que beneficiarnos de la energía solar. La pregunta es: ¿de qué otras formas podemos aprovechar la energía del sol?

Actualmente utilizamos la energía solar para distintos usos y para otros, todavía no se ha encontrado la forma:

Fines industriales: la realidad, es que la temperatura que nos llega del sol es relativamente baja, por lo que sus usos en la industria son limitados. Y es que, para un fin industrial térmico se necesita una importante diferencia de temperatura entre el foco térmico del que se extrae (en este caso el sol) y la temperatura del producto que resulta. 

Fines domésticos: esta fórmula es más sencilla ya que consiste en utilizar la energía solar para calentar el agua o la calefacción que usamos en las casas. Y es que, la temperatura que sale de nuestros grifos y que procede de una fuente de gas, puede alcanzar una temperatura de 70 u 80º, por lo que solemos mezclarla con agua fría para poder usarla. Una pérdida energética considerable que podría solucionarse si usáramos la fuente inagotable de la energía solar.

Cómo aprovechar la energía solar

Existen distintas maneras de aprovechar la energía que nos brinda el sol:

Colectores solares para uso doméstico: Basta con unos paneles solares en los tejados para calentar el agua que usamos en las casas, que puede usarse tanto para el aseo diario como para la calefacción. Estos paneles funcionan mediante un tubo que circula por dentro de una caja que tiene un cristal en su parte superior. El sol entra por el cristal y se produce calor dentro. Es un uso eficaz y de bajo coste.

Paneles fotovoltáicos para uso industrial: están fabricados con silicio principalmente y, consiguen que la energía solar se convierta en pequeñas corrientes eléctricas. Éstas transformadas de cierta forma, pueden producir la energía necesaria para mantener una vivienda o para hacer funcionar una antena en un lugar aislado. Sin embargo, como os comentábamos antes, esta energía es muy difícil de acumular, y además hoy en día, todavía resulta muy caro fabricar paneles solares. De esta manera, hay quien afirma que, a pesar de que su fin es ecológico, no resulta rentable. 

Trucos para que puedas aprovechar la energía del sol en tu casa

Aunque no tengas un panel fotovoltáico, ni un colector solar, en tu casa, puedes llevar a cabo ciertas medidas para aprovechar la energía que nos proporciona el sol: 

- Si tu casa recibe la luz directa del sol, deja levantadas las persianas y abiertas las cortinas para que pueda calentar la estancia. 

- En lugar de utilizar una secadora para secar la ropa, aprovecha el calor del sol y pon un tendedero fuera de tu vivienda, ya sea en el patio o en la terraza. Ahorrarás dinero y estarás contribuyendo a cuidar el planeta. 

- Coloca en tu terraza o tu jardín, luminarias que se cargan con la energía solar durante el día, para que lo iluminen de noche. 

- Para cargar algunos dispositivos pequeños como el móvil o el mp4, puedes usar pequeños sistemas solares. 

- Y, si puedes invertir algo de dinero, instala un calentador solar de agua.

Beneficios de usar la energía del sol en los hogares

- Usar la energía que nos proporciona el sol puede representar un gran ahorro de dinero, ya que puedes ahorrar un 30 o un 40% respecto a la factura del gas. 

- Las fuentes de energía solar son perfectas para aquellas personas que viven lejos de las ciudades y no tienen una fuente eléctrica o de gas para sus viviendas. 

- Es una medida que ayuda a cuidar el planeta ya que se basa en utilizar una energía renovable, no una energía no renovable y contaminante como puede ser el gas.