Qué tipos de mascarillas antivirus son recomendables

Los virus se propagan por el aire, se transmite a través del contacto directo. Basta con que una persona infectada estornude frente a nosotros para que entremos en contacto con esas gotitas de saliva que están en suspensión, así es como el virus ingresa en nuestro organismo. Es por ello que, una de las recomendaciones más básicas de los  médicos para evitar enfermedades es lavarse las manos con frecuencia, así como utilizar pañuelos de usar y tirar y usar mascarillas.

Es frecuente desde hace años ver a personas en el continente asiático usar mascarillas para evitar contagios, no así en Europa. Sin embargo, cuando surge una epidemia como el coronavirus, las mascarillas se agotan en los puntos de venta ya que usarlas, es una de las medidas de prevención que recomiendan agencias sanitarias y la OMS. Pero, ¿vale cualquier mascarilla para estar protegidos de un contagio?, ¿cuáles son los distintos tipos de mascarillas antivirus recomendadas?

Tipos de mascarillas

Según los informes que emiten las agencias sanitarias, los virus pueden pasar de una persona a otra al estornudar y toser. Las pequeñas gotitas de saliva que quedan en suspensión pueden llegar hasta otra persona y verse infectada. Es por ello que las dos medidas que recomienda la OMS para evitar contagios, bien sea de gripe común o incluso del temido coronavirus es:

- Utilizar mascarillas de forma adecuada (veremos más adelante cómo): cubrirse la nariz y la boca puede protegerte frente a un contagio o puede evitar que tú mismo contagies a otras personas. 

- Mediante una correcta higiene de manos, ya que se reduce el riesgo de infectarse al entrar en contacto con objetos que contengan el virus, ya que puede vivir unas horas fuera del cuerpo humano. 

Si estás pensando en adquirir una mascarilla para protegerte frente al virus, ten en cuenta que no todas tienen la misma utilidad, te presentamos 3 tipos de mascarillas antivirus que brindan distinto tipo de protección:

1. Máscara quirúrgica estándar

Es la que usan los cirujanos para realizar operaciones. Sirven para bloquear las gotitas de saliva o secreción nasal. Reducen la posibilidad de contraer virus de otra persona. Sin embargo, no ofrecen protección total contra los virus presentes en el aire ya que no sellan de forma completa la nariz y la boca, por lo tanto, las partículas pueden entrar por alguna abertura o incluso atravesar el material de la máscara. 

Son de usar y tirar, suelen tener varias capas finas que filtran las bacterias, el polvo o el polen, y unas gomas para encajarlas detras de las orejas. Son las que utilizan médicos, enfermeras o limpiadores.

Estas máscaras dejan los ojos expuestos lo que deja expuesto ante algunos tipos de virus como el coronavirus. En definitiva, brindan cierto apoyo pero no ofrecen protección total. En definitiva, sirven en un entorno clínico cuando van acompañadas de otras prácticas de higiene, pero no servirían para estar protegidos contra el coronavirus. 

Mascarilla N95

Las mascarillas N95 ofrecen una protección mayor que las quirúrjicas, ya que están diseñadas para evitar que el 95% de las partículas pequeñas entren por la nariz o por la boca. Sin embargo, para que puedan hacer su labor correctamente han de estar bien ajustadas, de lo contrario, los virus podrían colarse por las distintas aberturas. Eso hace que no sean adecuadas para niños, por su tamaño, ni para personas con mucha barba.

Este tipo de mascarillas son más compactas y tienen un respirador para facilitar que entre el aire, aunque puede ser más dificultoso que con una mascarilla de papel. Están recomendadas para protegerse frente a virus como el coronavirus.

Mascarilla FFP2

Las suelen utilizar aquellas personas que están expuestas, por su tipología de trabajo a partículas, polvo de metal, cortes de plástico, piedra, aerosoles con base acuosa, trabajos con plomo, humos de soldadura, aluminio, silicona, amianto, etc.

Disponen una válvula por la que se filtra el aire que se respira impidiendo que determinadas partículas o virus penetren en la zona de la nariz y la boca. De igual manera que la anterior, para que realice su labor correctamente, ha de estar bien ajustada sin que haya aberturas por las que se cuele el aire. 

Similares a las FFP2, están las FFP1 se utilizan para que los trabajadores se protejan en trabajos de corte de madera, hierro, cristal o textil y filtran el 80% de las partículas de aire. También puedes encontrar en el mercado la mascarilla FFP3 para trabajos relacionados con arsénico, plomo, cadmio, fibras de asbestos...

Las recomendadas por la OMS para protegerse contra el coronavirus es de tipo N95 o FFP2, es decir, máscaras con válvula que filtran un importante porcentaje de las partículas presentes en el aire. 

Cómo usar la mascarilla en caso de virus

Recogiendo las recomendaciones que da la Organización Mundial de la Salud (OMS), esto es lo que debes y no debes hacer: 

- Debes llevar mascarilla si tienes tos o estornudos o si sospechas que alguien en tu entorno tiene algún tipo de virus, como el COVID-19.

- Las mascarillas son efectivas pero no bastan por sí solas para prevenir un contagio, has de combinarlo con el lavado de manos frecuente con una solución hidroalcohólica o el uso de guantes, y gafas cubrir los ojos. 

- Antes de ponerte la mascarilla, has de lavarte las manos con un gel desinfectante o con agua y jabón incidiendo bien entre los dedos y las uñas. 

- Cuando te coloques la mascarilla, tómate el tiempo suficiente para ajustarla de tal manera que no haya espacios entre la cara y la máscara, no debe haber huecos por los que puedan introducirse partículas. 

- No toques la mascarilla mientras la usas, si lo haces, tienes que lavarte las manos, ya que la persona infectada al toser, puede haber dejado partículas de saliva en la parte frontal de la mascarilla. 

- No se deben reutilizar las mascarillas de un solo uso. Y, cuando notes que está muy húmeda, sustitúyela por otra. 

- En caso de usar mascarilla ante una epidemia como el coronavirus, quítatela siempre por detrás, no toques la parte delantera y deséchala en un recipiente cerrado. Lávate las manos tras usarla.