Ulises y el caballo de Troya: resumen y significado del mito griego

La Guerra de Troya es un evento destacado en la mitología griega y el punto de partida de esta historia. Comienza cuando Paris, hijo del rey de Troya, roba la esposa al rey espartano Menelao, secuestra a la bella Helena. 

Menelao queriendo recuperar a su esposa, viajó a Troya con tropas de toda Grecia, con Ulises como aliado. Inicialmente solo querían recuperar a Helena, pero conquistar la ciudad resultó tan difícil que la guerra duró 10 años. Así comienza esta historia legendaria de los antiguos griegos que está recogida en La Ilíada de Homero. 

Si quieres saber más sobre esta historia de la mitología griega, te invitamos a leer nuestro resumen sobre el mito del caballo de Troya y Ulises. Así como a aprender más sobre el significado de este mito.

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Mito del caballo de Troya y Ulises: resumen

Los griegos llevaban 10 años en guerra con Troya. Estaban acampados frente a las puertas de la ciudad, pero sus muros eran inexpugnables. 

Sin embargo, Ulises, rey de Ítaca, mantenía la esperanza de conquistar Troya. Era astuto, valiente, tenaz y sí, también tenía fama de llevar a cabo engaños. Ulises nunca se rendía y mientras en los demás cundía el desánimo, a él se le ocurrió una idea genial. En realidad fue la diosa Atenea, que le susurró al oído convertida en brisa la trampa que debía tender a los troyanos. 

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Ulises se reunió con Agamenón, jefe de las tropas griegas y le propuso el plan. Agamenón lo escuchó con gran atención y pensó que era una idea brillante. 

Lo primero que hicieron fue levantar el campamento y navegar con sus barcos lejos de la costa. En seguida, los troyanos pensaron que los griegos se habían rendido y volvían hacia Grecia. Pensaron que habían abandonado la idea de conquistarles tras tantos años de fracasos. La guerra había terminado y los troyanos saltaban de felicidad.

Un centinela, se dio cuento que los griegos habían dejado algo en su campamento, parecía una escultura enorme. Fue entonces cuando Príamo, rey de Troya, quiso comprobar por sí mismo de qué se trataba. Salieron de las muralas y vieron que era un enorme caballo de madera. Era realmente hermoso, estaba pintado de amarillo brillante,  le habían incrustado esmeraldas en los ojos y marfil en las correas. A los pies había un cartel que decía "Este regalo de los griegos es una ofrenda dedicada a Atenea para que nos permita volver sanos a casa".

Quedaron convencidos de que los griegos trataban de honrar a Atenea para que bendijese su vuelta a casa. Por lo tanto, no podían destruir la estatua del caballo de madera y decidieron llevarlo a la ciudad y exponerlo frente al templo de Atenea para evitar la ira de los dioses. 

Utilizaron grandes sogas para arrastrarlo pero antes de que cruzara las puertas de la ciudad, Casandra, una de las hijas de Príamo, les advirtió para que lo dejaran. Estaba convencida de que los griegos, grandes tramposos, querían engañarles. 

Nadie le hizo caso, pese a que Casandra tenía el don de la adivinación, pero le habían castigado impidiéndole tener el don de convencer a la gente, por lo que nadie le prestaba atención.

El caballo fue arrastrado al interior y, cuando hubo llegado frente al templo de Atenea se fueron a dormir y la ciudad quedó en silencio.

De noche, se escuchó la voz de Ulises dentro del caballo de madera ordenando a las tropas atacar. Aquel era el plan de Ulises, y había funcionado. El caballo de madera era una trampa, su vientre estaba hueco y en él estaban escondidos Ulises con veinte guerreros. Habían soportado el calor durante todo el día, pero durante la noche, salieron del caballo de madera y corrieron a las puertas para abrirlas de par en par. 

Los griegos en realidad no habían partido, solo habían fingido que lo hacían. Y así, con tamaña treta, los griegos entraron en Troya y la arrasaron. Mataron al rey Príamo y redujeron la ciudad a cenizas. Por fin podían regresar con sus familias, tras diez años asediando una ciudad, que cayó finalmente gracias al ardid de Ulises. 

Qué significa el mito del caballo de Troya

El mito del caballo de Troya y Ulises se recoge en La Ilíada de Homero. En ella se nos cuenta como durante diez años, los griegos asediaron sin descanso la ciudad. En aquellas batallas, entre los griegos destacaba el ideal de la valentía, la fuerza, la persistencia, el arrojo. Relatos como los de Aquiles y Héctor así nos lo transmiten.

Sin embargo, en el final de la ciudad de Troya no se dan estos valores, por el contrario, es otro valor el que vence. Se trata del valor de la astucia y la inteligencia, vencen las tretas y los ardides frente a la fuerza o el coraje. Y es que, la inteligencia y la astucia eran cualidades muy valoradas por los antiguos griegos. En este sentido, el valor de la astucia está representado por la figura de Ulises, a quien generalmente se le atribuyen cualidades positivas, pero también una negativa: es mentiroso y conoce el arte del engaño. 

Así, los griegos no vencen a través de la batalla o las guerras, consiguen la victoria por medio de una trampa. Esto nos indica que, en la guerra, todo vale. Cualquier acción es viable ser llevada a cabo a cambio de conseguir un objetivo. Es el clásico lema de "el fin justifica los medios".

Durante el engaño de los griegos, Casandra intenta avisar a sus vecinos, pero nadie le hace caso. En este sentido, al final es el destino el que impera. De hecho, una de las ideas más persistentes en la mitología griega es que el destino es más poderoso que la voluntad de los dioses o los hombres. Por lo tanto, cuando algo ha de ocurrir, nadie puede remediar que esto suceda. 

En este mito griego, como en muchos otros, los héroes cuentan con la ayuda de los dioses. Así, el héroe Ulises no idea por sí mismo el plan de introducir un caballo de madera hueco con las tropas, es la diosa Atenea quien le susurra el plan. 

Hoy en día, el término "caballo de Troya" todavía se usa para referirse a cualquier tipo de engaño o truco que implica obtener un objetivo. Es una metáfora de una trampa estratégica. Es también una advertencia sobre los regalos que pueden hacer otros o sobre tomar lo que otros dejan sin conocer bien de qué se trata.

¿Existió realmente la guerra de Troya?

En cuanto a si la guerra de Troya fue real, así como los protagonistas de ella, es un tema que sigue generando controversia. Los científicos suponen que los eventos de la Guerra de Troya, si los hubo, pudieron ocurrir alrededor del año 1200 a.C., en la séptima fase del asentamiento de Troya (Troya VII). Por lo tanto, los científicos asumen que en sus epopeyas, Homero se basó en tradiciones orales de los cinco siglos anteriores.

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¿Qué ocurrió con los protagonistas tras la guerra de Troya?

Ulises decide volver a Ítaca pero su accidentado viaje duró otros tantos años. Tras dejar Troya, deja ciego al cíclope Polifemo y atrae la ira de Poseidón quien hace que su viaje sea más complicado. 

Helena es arrojada de Esparta, y huye a Rodas, donde Polixena, reina de la Isla, la hizo ahorcar de un árbol en venganza de muerte de su marido en la guerra de Troya.

Aquiles muere en la batalla al ser alcanzado en el talón por una flecha envenenada. Aquiles muere de un flechazo en el talón, disparado por Paris. 

Paris quien tiene un combate a muerte con Menelao, se salva aunque finalmente muere por un flecha lanzada por el griego Filoctetes en venganza por la muerte de Aquiles. 

Menelao tras marchar de Troya, tiene su propia Odisea en su camino de regreso a Grecia.

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Bibliografía

• Mitología griega, Ediciones Michael Toubis, Sofia Souli
• Mitos griegos, editorial Vicens Vives, Maria Angelidou
• Los mitos griegos, editorial Ariel, Robert Graves
• La enciclopedia de la mitología griega, editorial Libsa, Guus Houtzager