Cómo tomar buenos apuntes en clase y lograr que sirvan para estudiar

Escribir unos buenos apuntes no consiste en dejarse la mano para escribir todo lo que dice el profesor, palabra por palabra, de lo contrario podrías ahorrarte el esfuerzo y grabar la clase y pasarla de nuevo en tu casa.

Para tomar buenos apuntes en clase y lograr que sirvan para estudiar es preciso saber discernir y seleccionar lo que es importante de lo que puedes descartar. Unos buenos apuntes pueden ser más útiles que un buen libro porque condensan la explicación del profesor (que ya hizo la labor de comprender y traducir la explicación).

No te pierdas estos consejos para crear y organizar las notas que tomas en clase de forma coherente y, sobre todo, útil.

¿Taquigrafiar o tomar apuntes?

El que toma buenos apuntes, apuntes que pueden servir para preparar mejor el temario no es un taquígrafo. Es decir, no es aquel que escribe al pie de la letra lo que dice el profesor. No tengas envidia de esos alumnos aplicados que escriben cuatro folios en clase y no se han perdido ni una coma. No se trata de copiar al dictado, sino entender y seleccionar.

Y es que, no todo lo que se dice en clase es esencial. De hecho, muchas veces los maestros repiten una misma idea de varias formas distintas para que se entienda bien. También hay profesores que explican con muchas palabras lo que otros en pocas, lo demás es un “extra” que adorna pero no llena.

Los profesores están para aclarar los puntos del temario, para dar una explicación más clara del tema a tratar, para solucionar las dudas y para ayudar a comprender y a aprender. Por lo tanto, copiar al dictado sin entender nada (“ya lo entenderé en casa”) es una pérdida de tiempo.

De esta manera, si eres capaz de tomar unos apuntes útiles y bien estructurados, te servirán mucho mejor que el libro de la asignatura. Pero, si tus apuntes son inconexos, deficientes, con errores e ideas a medias, más vale que los tires porque no te servirán de nada.

Qué necesitas para tomar unos buenos apuntes

Antes de nada, necesitas prepararte para tomar unos buenos apuntes, no necesitas grandes herramientas, tan solo:

Bolígrafo: a tu gusto, azul, negro, de punta fina, una pluma… Y no te viene mal tener uno de repuesto para no perder el tiempo cuando se te agote la tinta o no escriba.

Folios o cuaderno para cada materia: hay quien prefiere tomar apuntes sobre folios blancos y luego clasificarlos en una carpeta por temáticas y quien prefiere tener un cuaderno por cada asignatura. A tu elección mientras el material pueda estar organizado.

Como son los buenos apuntes que te ayudarán a estudiar

Son claros y van al meollo, no tienen frases que no llegan a ningún lado ni datos que no sirven.

Están bien estructurados: distinguen temas, capítulos, apartados, etc.

Son breves: olvida eso de apuntar anécdotas y reiteraciones de una misma idea.

Pautas para tomar unos buenos apuntes

Para que tus apuntes cumplan las reglas anteriores, es decir, sean claros, estructurados y breves, necesitas seguir una estrategia, entre oír y apuntar, debes dar varios pasos:

- Antes de apuntar una idea, trata de entenderla, si no la has comprendido, levanta la mano y pregunta.

- Una vez comprendida escribe los conceptos en tu cuaderno con tus propias palabras.

- Reduce lo máximo posible el texto, lo suficiente para entenderlo y no perderte nada importante.

- Utiliza la mejor caligrafía que puedas emplear, ya que de lo contrario, podrás no entender ni tu propia letra cuando comiences a estudiar. En este punto, va a venirte bien usar abreviaturas.

Abreviaturas útiles para los apuntes de clase o la universidad

Es el truco por excelencia de los que toman buenos apuntes. Algunas abreviaturas son perfectas para cuando vas con prisas. Te ayudarán a apuntar las ideas importantes y no olvidar o dejar ninguna atrás. Este listado de las usadas con frecuencia te puede venir bien:

nº: número

tb: también

xq: porque

/: mente (ejemplo facil/)

ej: por ejemplo

x: por

q: que

xa: para

tbj: trabajo

exm: examen:

txt: texto

doc: documento

intro: introduccion

=: igual

sol: solución

tª: teoría

Cª: ciencias

Hª: historia

Fª: filosofía

M: matemáticas

Puedes incluso crear tus propias abreviaturas para poder agilizar la toma de apuntes.

Cómo lograr tomar unos apuntes “limpios”

Cuanto más agradable sea el apunte, más fácil te será estudiar después. Si te enfrentas a una hoja con líneas torcidas, letras apretujadas, feas, borrones y tachaduras no estudiarás tan a gusto.

Si te lo propones, podrás tomar unos buenos apuntes y además limpios. Estos trucos pueden ayudarte:

- Comienza cada tema en un folio u hoja distinta, así podrás discernir entre las distintas temáticas.

- Deja un margen a la hora de escribir y no seas tacaño con los folios.

- Titula en mayúscula para romper con la monotonía del texto y haz que los títulos destaquen, ya sea usando otro color o subrayando.

- Utiliza llaves, flechas, diagramas o dibujos para que visualmente puedas tener la información más organizada y evitar el texto plano y largo.

- Enumera los folios para evitar que, si se te caen los folios, tengas un caos absoluto en tus apuntes.

- No hagas una letra apretujada o poco legible, de lo contrario, tendrás que poner a tu cerebro a trabajar para “traducir” ese texto cuando estudies.

Conclusión

Olvida aquello de copiar al dictado lo que dice el profesor, ya no eres un niño y tienes capacidad para poder, escuchar y discernir lo importante de lo superfluo y pasarlo a tus notas.

Si creas unos apuntes con buen fondo y forma (breves, claros y limpios), no necesitarás llegar a casa para pasarlos a limpio. Tomar buenos apuntes directamente en clase es posible. No olvides aprovecharte de las abreviaturas, te resultarán muy útiles.

En cualquier caso, los apuntes por sí mismos, aunque sean buenísimos, no valen para aprobar. Para lograr que sirvan para obtener buenas calificaciones, hace falta aprovecharse de ellos, no aparcarlos en la carpeta tras haberlos tomado.