¿Por qué sudo tanto por las noches?

Causas al sudor durante la noche: hiperhidrosis nocturna

Alba Caraballo - 2020-03-24 09:35:00 - Salud

¿Te has despertado alguna vez empapado en sudor? Es una situación desagradable: el pijama está mojado, el cabello también, el sudor ha calado las sábanas y sientes una sensación similar a la de estar en una sauna. 

Está claro que, si te abrigas demasiado y tu casa es cálida, lo más normal es que termines sudando por la noche pero, ¿qué ocurre si no es así?, ¿por qué se puede sudar tanto por la noche si el clima es fresco y no estás muy tapado? Hay otras razones por las que se produce lo que se conoce como hiperhidrosis nocturna

5 razones por las que sudas tanto por las noches

sudar mucho por las noches

El exceso de sudoración nocturna puede deberse a distintas causas, te explicamos cuáles son los factores que desencadenan la hiperhidrosis nocturna. 

Pero antes, es importante conocer por qué sudamos. Sudar es el mecanismo que pone en marcha el cuerpo para refrescarse. Cuando la temperatura aumenta por alguna causa, el sistema nervioso envía señales a las glándulas sudoríparas y éstas, se activan y comienzan a secretar pequeñas gotitas de agua a través de los poros. Y es que, esas gotitas en la superficie de la piel, al evaporarse, permiten que nos enfriemos y pueda bajar la temperatura. 

Cada persona es un mundo y, por ello, algunas tienen las glándulas sudoríparas más activas, tanto es así que incluso reaccionan cuando no hay motivo aparente. 

Sea como fuere, si están sufriendo de sudor por las noches y, te sueles despertar empapado, debes prestar atención a los signos ya que te ayudarán a detectar qué puede estar causando esta situación y poder pedir ayuda si se vuelve demasiado frecuente. Te ponemos sobre la pista de las 7 razones más comunes que causan el sudor nocturno: 

1. Menopausia y sofocos

Uno de los síntomas más conocidos de la menopausia son los sofocos. Es una sensación de calor repentina, como de sofocación, que se localizan principalmente en la cara y el cuello, aunque también puede darse una sensación de sudor generalizado. No todas las mujeres los viven pero aquellas que lo sufren pueden padecerlos desde la perimenopausia. Los sofocos ocurren durante todo el día, también durante el ciclo de sueño y, en estos casos, pueden llegar a despertar e impedir el correcto descanso. 

Se cree que esta hipersudoración se produce a causa de los cambios hormonales propios de la menopausia, además de los cambios que se producen en el sistema circulatorio. 

2. Infecciones

Algunos tipos de infecciones desencadenan esta hiperhidrosis nocturna. Son principalmente la tuberculosis, el SIDA, la osteomielitis, la endocarditis o el absceso pulmonar. Estas infecciones vienen acompañas además de otros síntomas como la fiebre, los escalofríos, dolor corporal, debilidad general, falta de apetito, pérdida de peso o dolores musculares.

Por lo tanto, si la sudoración nocturna viene acompañada de otros síntomas, es conveniente que consultes con tu médico. 

3. Medicamentos

Algunos medicamentos, en concreto las medicinas para tratar la depresión o determinados fármacos que tratan otras condiciones psiquiátricas pueden producir sudores nocturnos como efecto secundario. 

En caso de que sea tu caso y llegue a ser una molestia, habla con tu médico sobre la posibilidad de modificar la medicación en caso de que no sea un efecto temporal.

4. Trastornos del sueño

Algunos trastornos del sueño, como la apnea, hacen que la persona deje de respirar mientras duerme y además, esto puede suceder varias veces en una noche. Aquellos que tienen este problema generalmente experimentan somnolencia durante el día y presión arterial alta, además de despertarse bruscamente en medio de la noche.

Un estudio realizado en 2013 analizó a 822 personas que sufrían de apnea obstructiva, es decir, el tejido de la garganta bloqueaba las vías respiratorias, y no estaban recibiendo tratamiento. Se concretó que la sudoración excesiva era frecuente en personas con esta condición que no estaban siendo tratadas. 

5. Cáncer

En algunos casos, cuando los sudores nocturnos no son explicables o no son debidos a ninguna otra condición, pueden ser un síntoma de cáncer, aunque no es algo que suceda con frecuencia y suele venir acompañado con otros síntomas. 

Consulta a tu médico si los sudores vienen acompañados de una fatiga intensa, tienes malestar general desde hace días, tienes fiebre y no desaparece, has perdido peso de forma no explicable o tienes dolor de huesos. Algunos tipos de cáncer, como el linfoma de Hodgkin, el linfoma no Hodgkin y la leucemia están asociados con la sudoración nocturna. 

6. Estrés y ansiedad

El aumento de la sudoración está relacionado con un alto nivel de estrés o una situación de ansiedad. Analiza si tienes algún tipo de preocupación o miedo en estos momentos, si ese sentimiento de temor está constantemente presente, si ello te afecta causando molestias estomacales o te sientes más irritado de lo normal. 

El estrés es uno de los males de nuestro tiempo y es capaz de afectar a distintas condiciones física y anímicas, desde la facultad de la memoria al estado de ánimo pasando por la salud. Puede causar problemas para dormir e incluso sueños desagradables y pesadillas. 

Una persona que sufra de un trastorno de ansiedad puede despertarse empapado en sudor en medio de la noche. Por lo tanto, tratar ese nivel de estrés y ansiedad, ayudará a que los sudores nocturnos desaparezcan. 

7. Hipoglucemia

La falta de azúcar en la sangre también puede ser uno de los factores que desencadenan la sudoración. Las personas que padecen diabetes a veces tienen este síntoma, ya que durante la noche, se produce el mayor período sin tomar insulina. 

Qué hacer si sudo mucho por la noche

Si la sudoración nocturna, va acompañada de otros síntomas que pueden indicar que hay otra afección de salud importante, debes consultar cuanto antes con tu médico, en caso de que sea algo circunstancial y debido a una condición menor, puedes intentar: 

- Deja abierta las ventanas por la noche o usa un ventilador.

- Usa ropa de cama de algodón, evita las sábanas no transpirables o las colchas y edredones demasiado pesados.

- Utiliza pijamas ligeros que permitan transpirar al cuerpo.

- No te tapes demasiado por más que tengas esa costumbre y, si lo haces, intenta que sea solo con una sábana ligera. 

- No realices ejercicio físico a última hora del día ya que el cuerpo seguirá sudando durante un buen rato. 

- Evita las cenas picantes.

- Evita fumar o beber alcohol antes de acostarte