Qué cuidados seguir después de un trasplante de pelo
Recomendaciones útiles tras un microinjerto capilar
La técnica de microinjerto capilar o FUE (Follicular Unit Extraction) es uno de los sistemas quirúrgicos de trasplante folicular más avanzados que existe hoy en día y uno de las más solicitados, por su eficacia y rápido posoperatorio. Es por ello que, cada vez más hombres y mujeres recurren a esta técnica para recuperar el cabello perdido. En Quonomy.com te contamos en qué consiste esta técnica y qué cuidados seguir después de un trasplante de pelo.
Trasplante capilar o FUE
Existen distintas técnicas de microinjerto capilar pero, una de las que más se llevan a cabo es el método FUE.
Consiste en extraer de forma individual unidades foliculares de 1, 2, 3 o 4 pelos, junto con toda su estructura perifolicular, es decir, glándula sebácea, vasos capilares y músculo erector, de la parte posterior o lateral de la cabeza, la más poblada.
Estas unidades foliculares se implantan en el área que sufre alopecia y desea cubrirse con cabello nuevo. En una sesión se pueden transferir de una zona a otra hasta 5000 unidades foliculares.
Al ser una técnica quirúrgica, se ha de realizar en una clínica homologada a tal fin, con todas las medidas de seguridad e higiene.
Esta técnica es una de las más sencillas porque no se necesitan puntos y no deja cicatrices lineales en el cuerpo, como sí sucede en otras técnicas como FUSS. En esta última se extrae una banda de cabello de entre 15 y 20 centímetros de largo por 1 centímetro de ancho.
Las personas que suelen recurrir a este tratamiento son aquellos que tienen una pérdida de cabello limitada y de escasa extensión, por ejemplo para cubrir unas entradas o una coronilla con calvas, alopecias cicatriciales localizada, cubrir cicatrices, etc.
Cómo se hace un microinjerto de cabello
1. Se rasura la zona de donde se va a extraer el cabello donante para detectar y extraer con más facilidad las unidades foliculares.
2. Se marca las zonas que se van a cubrir para valorar la cantidad de cabello donante que habrán de extraer.
3. Se anestesia las dos zonas a tratar, tanto la donante como la receptora, para que el paciente no perciba molestias durante el tratamiento.
4. Se extraen las unidades foliculares de la zona donante y se injertan en la zona receptora.
Qué esperar tras un trasplante capilar
- Los primeros 15 días es normal sentir molestias en la zona, como picazón o inflamación. En este tiempo aparecen pequeñas costras que deben caer solas.
- Entre la tercera semana y los dos meses, los folículos se desprenden del cabello trasplantado. No debes alarmarte ya que volverá a crecer cabello nuevo.
- A partir del tercer mes, el cabello nuevo comienza a crecer donde antes había una calva.
- Después de 6 meses el crecimiento de pelo es más abundante y más fuerte.
- El resultado óptimo se obtiene al cabo de un año, donde ya no se distingue el cabello trasplantado del natural.
Cuidados tras un trasplante de pelo
La técnica de trasplante capilar se realiza en hospital o clínica y, una vez realizada, no es necesaria la permanencia en el centro, aunque sí se pueden descansar unas horas para garantizar que el paciente está en buenas condiciones.
El paciente deberá seguir una serie de cuidados tras el trasplante de pelo, o más bien unas recomendaciones para que el procedimiento sea exitoso:
Para tratar la irritación en la cabeza
Es normal sentir picazón e incluso irritación en la zona durante los primeros días tras el injerto, por lo que, los médicos recomiendan aplicar una solución salina para aliviar esta molestia. Además, se puede aplicar un gel aloe vera para calmar la piel.
Si sientes dolor...
Tras la operación de injerto de pelo, se recomienda tomar antiinflamatorios ya que el cuero cabelludo puede inflamarse después de este tratamiento. Evita la aspirina y consulta con tu médico si tomas habitualmente otros medicamentos.
Para evitar la hinchazón, debes dormir con la cabeza elevada en 45 grados durante tres noches después del procedimiento de trasplante de cabello.
Evita las bebidas alcohólicas hasta cinco días después de haberte realizado el microinjerto capilar.
¿Puedo cubrir la cabeza tras un injerto de pelo?
Durante los primeros tres días, la cabeza debe permanecer descubierta. El médico puede facilitarte un sombrero especial, que ejerce poca presión sobre la cabeza para evitar el sol, sin embargo, los cascos de motocicleta y gorras solo se pueden usar después de un mes tras la operación.
Cómo lavar la cabeza tras un trasplante capilar
Después de un injerto de cabello, se recomienda lavar la cabeza con agua tibia pero solo a partir del cuarto día. Intenta no verter agua directamente en la zona donde se injertan los folículos y no hacer presión sobre la zona. Lávate el pelo realizando movimientos suaves, sin rascar el cuero cabelludo y seca suavemente el pelo sin aplicar la presión habitual. No puedes bañarte en el mar o la piscina hasta un mes después de la operación.
Cómo peinar pelo injertado
Para peinarte, hazlo con cuidado evitando pasar las cerdas de los peines en las raíces implantadas para no moverlas. Cuando se hayan caído los folículos implantados, ya puedes comenzar a teñirte el pelo, cortarlo o rizarlo.
Cuándo volver al trabajo si me he hecho un trasplante de pelo
En general, podrás volver al trabajo al día siguiente, excepto si necesitas usar casco para tu trabajo o realizar esfuerzo físico, en cuyo caso habrás de esperar entre dos semanas y un mes, según te recomiende tu médico. Sin embargo, algunas personas prefieren regresar unos días después del procedimiento para evitar mostrar la hinchazón o costras resultantes tras el injerto.
¿Puedo hacer deporte?
Evita los deportes y realizar actividades que impliquen transpirar durante al menos cuatro semanas después. Consulta con tu médico si realizas un deporte de contacto ya que el período podría ampliarse.
¿Se puede infectar un trasplante de pelo?
Es raro que ocurra una infección en la zona donante o receptora pero, para evitarlo, evita que la suciedad pueda llegar al cabello.
Para ello, no te toques la cabeza con las manos, una gran fuente de gérmenes y, si no tienes más remedio que hacerlo, lávate bien las manos antes o esterilízalas con un gel desinfectante.
Si notas dolor intenso, enrojecimiento o hinchazón anormal, consulta con tu médico lo antes posible.