Qué puede pasar si duermes con lentillas

Está claro que dormir con lentillas no es una buena idea pero, ¿a quién no se le ha olvidado quitarlas alguna noche o estaba tan cansado que prefirió dejarlo para otro momento?

Los ojos son unos órganos extremadamente sensibles por lo que cualquier lesión o infección afecta a nuestra capacidad de visión, por lo tanto, si no quieres tener una consecuencia para tu vista sé muy cuidadoso con el uso de las lentillas y, si aun dudas sobre ello, conoce lo que puede pasar si duermes con lentillas.

Dormir con lentillas: consecuencias para la vista

Si usas lentillas, ya sabrás que no puedes dormir con ellas, por lo tanto, si lo haces no puede ser otra cosa que un descuido, pereza u olvido. Lo normal es dejar que el ojo descanse tras haber usado las lentes de contacto y retirarlas cada 8 horas, sobre todo si tienes una alta graduación en la vista. 

Si, eres de los que piensan que no pasará nada por hacerlo de vez en cuando, deberías seguir leyendo y conocer cuáles son las consecuencias de dormir con lentillas:

Falta de lubricación en el ojo

Durante la noche, el ojo no lubrica de la misma manera que por el día, por lo tanto, las lentes no reciben esa lubricación que necesitan. Esa lubricación la producimos nosotros mismos al parpadear, un gesto que repetimos cientos de veces al día, casi sin darnos cuenta pero que no realizamos durante la noche. 

Adherencia de la lente de contacto

Cuando la lubricación, junto con el proceso de limpieza del ojo que se realiza también con el parpadeo, no se produce, hay más posibilidades de que las lentillas se adhieran a la córnea. ¿Qué puede provocar esto? Ojos irritados y ligeramente pegados a los párpados. 

Falta de oxigenación en el ojo

Cuando estás despierto, el parpadeo constante del ojo hace que las lentes se muevan ligeramente, es un simple milímetro pero este ligero movimiento permite que la córnea reciba oxígeno. Ya imaginarás qué ocurre cuando duermes y no parpadeas, el ojo no se oxigena adecuadamente. Sin embargo, los ojos necesitan oxígeno, como el resto del cuerpo. Y, las lentes de contacto suelen estar hechas con un material de plástico que, por muy delgado que sea, no deja transpirar completamente al globo ocular. 

Aumento de las infecciones del ojo

Cuando el ojo tiene menos oxígeno, las córneas pueden inflamarse, produciendo una afección conocida como queratitis. Es una inflamación que provoca la aparición de pequeños espacios en la superficie de los ojos y, las bacterias pueden abrirse paso a través de los huecos e invadir la córnea, aumentando la posibilidad de sufrir una infección bacteriana en el ojo. 

Un síntoma de que estás sufriendo infección en el ojo o inicio de queratitis puede ser irritación, picazón y enrojecimiento. No usar lentes de contacto regularmente y seguir las instrucciones de tu oftalmólogo puede reducir los síntomas considerablemente.

El peligro de echar una siesta con lentes de contacto

Muchas personas se quitan las lentillas para dormir por la noche pero, se saltan este paso durante las siestas sin saber que, igualmente se están arriesgando a poner en jaque a su salud visual. 

Si bien es cierto que, cuanto más tiempo se duerma con las lentes más riesgos se corren y que, 10 o 20 minutos es poco tiempo, sigue habiendo posibilidades de lesiones o infecciones. 

Por lo tanto, no tomes la costumbre de echar cabezadas con las lentes puestas. 

En cualquier caso, hay algunas lentillas que si sirven para dormir una siesta con ellas, sin embargo, siempre ha de ser tu oftalmólogo el que te marque la pauta y avisarte de que están hechas para usarse en periodos prolongados. Son lentes hechas con un gel de silicona que permite mejor la transpiración del ojo. 

Conclusión

Dormir con lentes de contacto de forma habitual es una costumbre peligrosa. Puedes ahorrarte muchas molestias, dolor, dinero en medicamentos y tiempo en el médico si sigues la pauta que te ha recomendado tu médico para su uso. 

Si una noche has olvidado por alguna causa quitártelas, puede que al día siguiente notes la vista más cansada y los ojos irritados, sin embargo, con lágrimas artificiales y descanso de lentillas durante unas horas, te sentirás mejor.

Sin embargo, no lo tomes como un hábito ya que puede llegar a crear lesiones en el ojo que compliquen tu visión.