Escalofríos en el cuerpo: qué son y por qué suceden
Por qué se produce el escalofrío y a qué es debido
Esa sensación repentina de frío que viene acompañada de una leve convulsión o contracciones musculares es lo que conocemos como escalofrío. ¿Son preocupantes?, ¿por qué se acompañan con piel de gallina?
Los escalofríos pueden originarse por distintas causas, desde una enfermedad a una reacción emocional ante miedo o una situación intensa. Después de leer este artículo conocerás un montón de curiosidades sobre los escalofríos en el cuerpo.
Qué son los escalofríos
Una de las funciones que tiene nuestro organismo es la de regular la temperatura corporal. Cuando la temperatura del cuerpo sube, éste se defiende mediante la sudoración para bajar la temperatura; por el contrario, cuando la temperatura del cuerpo baja se produce una automática contracción y relajación de los músculos para generar calor, es lo que se conoce como escalofrío.
De esta manera, se llama escalofrío a ese momento en que los músculos se expanden y contraen repetidamente, mientras que los vasos sanguíneos se contraen para conservar el calor. Pueden ocurrir tanto por frío, como por fiebre o ante una emoción intensa.
Y es que, cuando hace frío, el cerebro recibe información de las terminaciones nerviosas sobre la temperatura ambiental fría y reacciona, mandando la orden al sistema circulatorio para que estreche los vasos sanguíneos, conocido como vasoconstricción. De esta forma, llega menos sangre a las zonas periféricas de nuestra piel y así se consigue que la pérdida de calor sea menor.
De esta manera, un escalofrío se puede producir, bien cuando sientes frío o también como método de defensa ante una infección, ya sea viral o bacteriana, por eso es tan frecuente tener escalofríos que recorren el cuerpo cuando tienes una gripe.
Ante una enfermedad, los escalofríos pueden ser constantes y durar varios minutos, o se pueden dar episodios de escalofríos a lo largo del día
Causas de los escalofríos
Existen distintos desencadenantes para un escalofrío concreto o un episodio de ellos que perdura durante un tiempo:
Enfermedad viral o bacteriana puede provocar escalofríos
Si esa sensación de frío que te hace convulsionar y recorre toda tu espalda y tus piernas va acompañada de otros síntomas como dolor corporal, cansancio o fiebre, es más que posible que esté relacionado con una infección causada por virus o bacterias, como puede ser un catarro, bronquitis, gripe o neumonía.
En este caso, el escalofrío, por más molesto que pueda resultar, es una respuesta del cuerpo para combatir la infección. Y es que, los escalofríos contribuyen a aumentar la temperatura del cuerpo dando más herramientas al organismo para acabar con los agentes infecciosos.
Los escalofríos cesarán cuando comience la mejoría de la enfermedad.
Escalofríos como respuesta emocional
No solo una gripe provoca escalofríos, también se pueden provocar como una reacción emocional ante una situación que provoca miedo, ansiedad, pánico o angustia.
Ver también: cómo ayudar a alguien con un ataque de pánico
De hecho, cuando se desencadena un ataque de pánico, puede producir entre otros síntomas como las palpitaciones, sudoración, dolor en el pecho, o escalofrío.
Otras respuestas emocionales como presenciar algo impactante o que nos ha emocionado, puede producir una respuesta automática de escalofrío y piel de gallina.
Nivel bajo de azúcar en sangre y escalofríos
La hipoglucemia, o nivel bajo de azúcar en sangre, es más frecuente en personas con diabetes, aunque se puede producir un episodio puntual de hipoglucemia que puede provocar mareos, aturdimiento y escalofríos.
En estos casos, es necesario recuperar el nivel de azúcar óptimo en sangre, bien sea con el tratamiento específico en caso de la diabetes o comiendo algo para reponer los niveles.
Escalofríos por hipotermia
Estas contracciones involuntarias de los vasos sanguíneos cuando tenemos escalofríos producidos por el frío, provocan un gasto extra de la energía de nuestro organismo y, llega un momento que, ni las contracciones, ni la energía del cuerpo sirven, ya que el frío comienza a llegar a la parte más interna del cuerpo.
Es en este momento cuando el cuerpo comienza a entrar en hipotermia, es decir, una temperatura por debajo de lo que el cuerpo necesita para funcionar correctamente o incluso para vivir.
Leer + :Qué es la hipotermia
Enfermedades que causan escalofríos
La malaria es una enfermedad transmitida por un mosquito hembra infectado y puede provocar ataques periódicos con fiebre alta, náuseas, dolores de cabeza, sudores y escalofríos. Es una enfermedad rara en países occidentales pero podrías haberla adquirido en algún viaje a zonas como el África subsahariana, América Central o del Sur.
Otra enfermedad asociada con los escalofríos es la leucemia. Los síntomas de la leucemia pueden incluir inflamación de los ganglios linfáticos, junto con fiebre, escalofríos, fatiga, pérdida de apetito, sudores nocturnos, dolor abdominal e infecciones recurrentes.
Puedes sentir escalofríos debido a una infección causada por un cálculo renal, una masa dura que se forma en el riñón cuando no se bebe suficiente agua ni se lleva una dieta rica en proteínas.
La tiroides es una hormona que ayuda al cuerpo a mantenerse caliente. Si no funciona correctamente y se muestra poco activa, lo que se conoce como hipotiroidismo, podrían sufrirse distintos síntomas, entre ellos los escalofríos.
Leer +: Cómo cuidar la glándula tiroides
Cuándo acudir al médico si se tienen escalofríos
Si no sufres un escalofrío sino un episodio en el que no cesan y además van a acompañados de estos síntomas, consulta con tu médico:
- Rigidez en la nuca.
- Dificultad para respirar.
- Tos severa y sibilancias.
- Confusión y lentitud.
- Micción abundante o falta de ella.
- Dolor fuerte abdominal.
- Fiebre alta por más de tres días.
- Fiebre en un niño menor de tres meses.
- Fiebre en niños mayores de tres meses que están aletargados.
Cómo se tratan los escalofríos en casa
El tratamiento generalmente se basa en si los escalofríos van acompañados de fiebre, los días que persiste y la intensidad de ésta. Si es leve y no hay más síntomas graves, basta con descansar y reponer líquidos.
En el caso de los niños, no los tapes con mantas gruesas o muchas capas de ropa ya que puede haber riesgo de deshidratación.
Conclusión
Tener escalofríos puede ser algo tan normal como un intento del cuerpo de calentarse, pero si están acompañados de otros síntomas, sería considerable buscar atención médica.
Y es que, el escalofrío no emocional es síntoma de que algo no va bien, por lo tanto se ha determinar la causa que los está provocando, más aun si se acompaña de fiebre o sucede en niños pequeños.
