Por qué ronco si antes no lo hacía

¿Tu pareja ha comenzado a quejarse porque roncas durante la noche?, ¿te despiertas a ti mismo porque has producido un fuerte ronquido? Incluso aunque nunca hayas roncado o solo lo hayas hecho cuando estabas acatarrado, un buen día puedes comenzar a realizar esos sonidos guturales que pueden ser ligeros o tan fuertes que impida el sueño de tu pareja. 

Si es tu caso, es posible que te estés preguntando por qué roncas si antes no lo hacías. Veremos qué causa el inicio de estos sonidos y qué puedes hacer para volver a dormir plácidamente y sin molestar a nadie y sin sufrir las consecuencias que provocan.

Por qué se producen los ronquidos

Todos hemos roncado en un momento determinado, bien sea porque estés sufriendo un catarro, estés atravesando la fiebre del heno, tengas sinusitis, etc. Sin embargo, si has notado que últimamente tu pareja te despierta varias veces en una noche porque has comenzado a roncar de forma regular, es posible que te preguntes qué ha cambiado o por qué has comenzado a roncar. 

No solo es un sonido poco atractivo, sino que además es molesto si compartes cama e incluso para ti mismo, que puedes despertarte con la voz ronca, la garganta seca y molestias en ella. Pues bien, has de saber que el ronquido no es otra cosa que un sonido de asfixia o gruñido que se produce cuando hay cierta obstrucción en las vías respiratorias al dormir.

Al entrar menos aire del que debiera a través de la tráquea, el tejido de la garganta vibra produciendo esos sonidos ásperos, graves y continuados durante la noche. Hay quien emite unos fuertes e intensos ronquidos que pueden ser escuchados incluso desde otra habitación, y para quien son leves gruñidos que no perturban tanto el sueño de los demás. En cualquier situación, la persona que ronca lo hace debido a esta obstrucción del aire, por lo tanto, la pregunta que importa no es por qué has comenzado a roncar, sino qué está causando esta restricción de aire en la tráquea.

Qué provoca los ronquidos

Los roncadores habituales suelen emitir estos gruñidos porque tienen una garganta estrecha, un paladar blando, por la relajación de las vías respiratorias, la mandíbula cayendo hacia atrás debido a la postura durante la noche, problemas de obesidad o sobrepeso, tener una lengua grande en una boca pequeña, tono muscular deficiente, uso de determinados medicamentos o beber alcohol habitualmente antes de acostarse.

Sin embargo, si eres un "nuevo roncador o roncadora" y hace poco tiempo que has comenzado a roncar de forma regular, puede que la causa esté en otro detonante:

- Has aumentado repentinamente de peso, esta grasa además de en la zona del abdomen, piernas o glúteos, puede haberse asentado alrededor del cuello.

- El insomnio o la falta de sueño reparador puede hacer que en esos microsueños tus vías respiratorias se relajen más cierren la garganta.

- Tienes alguna lesión en la mandíbula o alguna alteración, en concreto, esta situación se conoce como retrognatia, y sucede cuando la dentadura inferior está alineada por detrás de la superior.

- Estés adoptando una nueva postura a la hora de dormir que ejerce presión sobre las vías respiratorias. Por ejemplo, si te colocas en la cama boca arriba, será más fácil que la tráquea se cierre parcialmente y comiencen los ronquidos. 

- Un catarro, gripe, amigdalitis, congestión nasal o alergias puede iniciar un período de ronquidos y extenderse a lo largo de varias semanas, hasta que el tejido del paladar, faringe, laringe, etc. deje de estar irritado o hinchado.

- Si has comenzado a fumar o lo estás haciendo con más asiduidad, es posible que se haya irritado el revestimiento de la garganta, provocando ronquidos mientras duermes. El exceso de alcohol puede provocar el mismo resultado.

- Ciertos medicamentos como las pastillas para dormir o los antihistamínicos pueden relajar las vías respiratorias favoreciendo que se produzcan estos gruñidos.

- Estás entrando en la menopausia, una etapa en la que se empieza a acumular grasa en la base del paladar y esto obstaculiza el paso del aire.

- Quizás has roncado de forma ligera siempre y tu nueva pareja es más sensible a los sonidos nocturnos y te ha llamado la atención sobre algo que lleva ocurriendo desde hace mucho tiempo.

Las mujeres también roncan

Aunque hemos asociado durante años los ronquidos con el género masculino, la realidad es que las mujeres de cualquier edad también roncan, aunque especialmente aquellas que sufren de sobrepeso, alteración en la mandíbula o menopausia.

Según los datos la Asociación Británica de Roncadores, en el Reino Unido hay 4,5 millones de mujeres que han confesado ser roncadoras, en el caso de los hombres la cifra sube a 10,4 millones.

Aunque no hay datos aproximados, la Unidad del Sueño de la Fundación Jiménez Díaz afirma que aproximadamente ronca la mitad de la población masculina adulta, y la cuarta parte de la población adulta femenina. 

Por lo tanto, aunque sea un tema que levante suspicacias y mucho pudor entre las mujeres que no quieren verse en esa imagen en la cama con la boca abierta y emitiendo sonidos guturales profundos, la realidad es que el roncar no es cosa de chicos ya que, como hemos visto, implica una relajación en las vías respiratorias debido a muy diversas causas y esto, no tiene género.

Consecuencias de roncar durante la noche

Desafortunadamente, los ronquidos prolongados se han relacionado con síntomas como letargo,  irritabilidad durante el día, cansancio, somnolencia, falta de concentración, molestias en la garganta, ronquera e incluso falta de conciliación familiar debido a la molestia que produce en la pareja.

Otra de las consecuencias que provocan los ronquidos son trastornos del sueño como la apnea del sueño. 

La apnea del sueño ocurre cuando dejas de respirar de forma total o parcial durante más de 10 segundos durante el sueño. A este momento le sigue un instantáneo jadeo al iniciar de nuevo la respiración y comienza el ronquido. Esto puede suceder en ciclos durante la noche.

Cómo evitar roncar durante la noche

Si te angustia pensar que has comenzado a roncar y que a partir de ahora las noches van a cambiar considerablemente, has de saber que un alto porcentaje de los casos de roncadores y roncadoras tiene solución. 

Ver también: tratamientos para dejar de roncar

Para encontrar el tratamiento adecuado a tu caso, es necesario que consultes con tu médico para detectar el problema de origen y poder acudir al especialista indicado:

- Si se trata de una alteración en la madíbula, un dentista puede proceder a la corrección de la mordida para evitarlo.

- Si el paladar o la base de la lengua son los que están causando problemas, hay cirugías menores. que lo corrigen. 

- En caso de tener unas amígdalas muy grandes, se pueden extirpar.

- Cuando el problema reside en la nariz hay médicos que recomiendan colocar un dispositivo sobre la nariz que suministra aire de forma constante para que las vías respiratorias no colapsen. Esto suele suceder en caso de diagnosticar apnea del sueño.

- Los casos de ronquidos por sobrepeso ceden cuando la persona pierde gran parte de esa grasa excedente.

- En el mercado encontrarás distintos dispositivos que aseguran ser la solución definitiva a los ronquidos, desde bandas para la nariz a pastillas pasando por sprays nasales. Sin embargo, muchas personas los han probado todos sin encontrar la solución a su caso. Y es que, no todos los remedios son adecuados para todas las personas, por lo que es importante tener paciencia, realizar ciertos cambios en el estilo de vida y estar dispuesto a experimentar distintas acciones.

- En caso de que hayas notado que roncas más cuando duermes boca arriba, intenta adoptar una postura de lado para favorecer la respiración.