Adicción al móvil en la adolescencia: ¿cuáles son sus síntomas y cómo superarlo?
Cómo saber si tu hijo adolescente tiene adicción al smartphone y cómo ayudarle
¿En qué momento el uso del teléfono móvil pasa a convertirse en una adicción?, ¿crees que tu hijo adolescente depende tanto de su smartphone que se ha convertido en un problema?
Conoce cuáles son los síntomas que indican un problema de comportamiento frente a la tecnología móvil y qué hacer frente a la adicción al móvil en la adolescencia.
Adicción al móvil en la adolescencia
Partamos de la base que la adicción a los dispositivos móviles no está recogida como tal, hasta el momento, los psicólogos y expertos lo catalogan como un trastorno del comportamiento y no como una adicción como puede ser la adicción a las drogas, al juego o al alcohol.
Hemos de asumir que, la tecnología forma parte de nuestra vida y, formará parte del futuro de nuestros hijos. Eliminarla de sus vidas, hoy en día, carece de sentido porque la necesitarán para trabajar, para aprender o para relacionarse. Sin embargo, los adolescentes tienen una relación compleja con la tecnología. En algunos casos generan una dependencia tan grande que conviven con su teléfono en el aula, gestionan sus relaciones sociales a través de este pequeño aparato y lo utilizan como entretenimiento, constantemente, a todas horas.
Es complicado hablar con ellos o tener una plácida comida en familia porque, su teléfono tiene la actividad de un ministro, capta su atención como ninguna otra cosa.
Tanto es así que, algunos adolescentes generan una obsesión por su teléfono que termina convirtiéndose en una adicción.
Muchos padres comienzan a preocuparse de esta excesiva dependencia, las estadísticas refrendan esta preocupación ya que muestran que la mitad de los adolescentes “se sienten adictos” a los dispositivos móviles. Son usuarios “online” prácticamente constantes.
Los niños ya comienzan a pedir un móvil y, a los 14 años, 9 de cada 10 adolescentes ya tienen un terminal, una poderosa herramienta en sus manos que, sin el suficiente control, puede llegar a absorberles por completo.
Síntomas que indican una adicción al móvil en la adolescencia
Los padres escuchamos mucho sobre la importancia de educar a nuestros hijos en un uso responsable de la tecnología y, en la limitación y control del acceso que tienen a redes sociales. Sin embargo, el equilibrio en el uso de los smartphones no parece existir en la práctica. Si comienzas a pensar que tu hijo tiene un problema de adicción al smartphone, toma como ejemplo este modelo de cuestionario sobre el juego compulsivo y el abuso de sustancias publicado en Frontiers in Psychiatry y que puede ser usado para medir el uso de los teléfonos móviles:
- ¿Tu hijo adolescente usa el móvil en situaciones peligrosas, como mientras conduce?
- ¿El uso que hace de su smartphone causa conflictos en casa?
- ¿Tiene efectos negativos en su rendimiento escolar?
- A pesar de los efectos que está produciendo en su vida, continúa usándolo en exceso.
- Comprueba su móvil constantemente y como por impulso, incluso en ráfagas cortas.
- Necesita contestar de forma inmediata a los mensajes que le llegan.
- Si no tiene el móvil, se lo has quitado o lo ha olvidado se muestra irascible y con ansiedad.
- En situaciones en las que no se puede usar el móvil se muestra inquieto.
- Sufre trastornos del sueño.
- ¿Sus amistades o relaciones familiares se ven afectados por el uso del teléfono?
- Han cambiado sus hábitos alimenticios sin razón aparente.
- Su estado de ánimo ha cambiado sin explicación ninguna.
- Si has respondido "sí" a la mayoría de las respuestas, es posible que te enfrentes a un problema de "adicción" de tu hijo adolescente al smartphone.Cómo ayudar a los adolescentes a superar una adicción al smartphone
Antes de demonizar al teléfono, hemos de reconocer que el buen uso del celular puede ser beneficioso para los adolescentes. Si lo usan para informarse, para conectarse con sus compañeros, para usar aplicaciones que les ayuden a organizarse o a aprender, y lo hacen dentro de unos límites, están haciendo un uso responsable.
Es importante educar a los adolescentes para que puedan tomar el control de su teléfono y no sea el teléfono el que les domine a ellos, el equilibrio y el punto medio es lo saludable. ¿Qué puedes hacer para lograrlo?
Sé un ejemplo para tu hijo adolescente
¿Cómo vas a pedir a tu hijo que deje su móvil cuando tu no te separas del tuyo? Si tu mismo tienes una conducta adictiva hacia tu smartphone es muy difícil lograr que tu hijo adolescente no repita tu comportamiento. Somos espejos en los que se miran y, además, el discurso no sería coherente.
Habla con tu hijo sobre los móviles
En lugar de dar sermones sobre el tiempo que pasa con el móvil, ya que en el momento en que inicies la regañina, habrás perdido la atención de tu hijo, ten una conversación productiva en la que le expongas qué es lo bueno de la tecnología móvil e incluso le enseñes a usarla de forma productiva, y que puede resultar peligroso. Intenta poner algo negativo que te haya pasado como ejemplo y convierte la charla en algo animado para que te escuche y entienda qué quieres decir.
Pacta los límites del uso de la tecnología móvil
Los psicólogos nos dicen que una de las cosas más importantes que debemos imponer a los niños es normas y límites, desde su primera infancia. Que lleguen a la adolescencia no significa que debamos dejar las reglas de lado porque ya son mayores. Debemos modificar y adaptar los límites, pero mantenerlos. Uno de ellos puede resferirse al uso del teléfono. Por ejemplo, “en la mesa no puede haber móviles”, “cuando te vayas a la cama, se apaga el teléfono”. Establece zonas sin pantallas: las comidas, las salidas familiares y las reuniones sociales son ejemplos de momentos en que si usa el teléfono, dejará de establecer relaciones sociales, por lo que has de decidir cuáles son esos límites y… cumplirlos.
Control parental
La adolescencia es una época llena de peligros ya que los jóvenes se sienten mayores de lo que son en realidad y no valoran ciertos riesgos. Por lo tanto, debes conocer qué tipo de aplicaciones usa, dónde se registra y qué tipo de relaciones establece en las redes sociales. Existen aplicaciones que pueden monitorear el tiempo de pantalla y cierran aplicaciones cuando se ha cubierto ese tiempo. De esa forma, si crees que no debe pasar más de 2 horas al día con el teléfono, no podrá hacerlo.
Qué hago si mi hijo adolescente no puede dejar de usar el teléfono
Si crees que la situación está fuera de control y, cuando intentas establecer límites, vigilar el uso que hace del smartphone o simplemente prohibir su uso en determinadas situaciones tu hijo se vuelve agresivo y conflictivo, quizás sea momento de pedir ayuda.
Ante la sospecha que tu hijo tiene un problema que afecta a su vida, a sus relaciones, a sus resultados escolares y a vuestra vida en familia podéis a acudir a terapia. Una terapia para cambiar el comportamiento del adolescente puede ayudarle a reconocer su problema y a dirigir su conducta hacia hábitos más positivos y saludables.